Un comerciante de Río Piedras denunció que fue víctima de brutalidad policiaca ayer de madrugada, cuando fue detenido por una infracción vehicular por un agente de la Unidad Motorizada de Bayamón, en la carretera #862, frente a la farmacia Caridad en Hato Tejas.

El querellante fue multado por el agente Ocasio, con el número de placa 18896, de la División de Patrullas de Carreteras, por supuestamente rebasar dos semáforos en rojo, no guardar distancia, y por no detenerse ante la señal de un policía.

En las multas se alega que los semáforos rebasados están ubicados en las carreteras #2 y la 29, éste último al lado del Parque de las Ciencias de Bayamón.

“Si verificas (en el lugar donde me detuvieron) no hay semáforo y yo estoy llegando a mi casa... (la dirección de los boletos) no es cierta… yo estoy allá en Hato Tejas, sector El Frutal, de Bayamón… (Le dije): ‘Dime qué está pasando, dime por qué me detienes’... (me golpeó), la fuerza de la ley encima de mí”, declaró el comerciante, quien es el propietario de Pedro’s BBQ, en la avenida Universidad de Río Piedras.

Según Pedro Desiderio Curiel, cuando se bajó de su vehículo, el policía le dio un puño en el ojo derecho y lo derribó sobre el pavimento para colocarle las esposas.

“Él se paró al lado de mi cristal (de su vehículo) y me manda a detener y yo me detengo normal… no me dio tiempo de nada, me bajé, pum, y pal piso a arrestarme. Y yo digo: ‘hello, ¿qué pasó aquí?’”, se cuestionó Desiderio.

El policía que interviene estaba solo en la motora, aunque después llegó todo un contingente, explicó el hombre.

Cuando se le preguntó si estaba bajo los efectos de bebidas embriagantes al momento de ser detenido, sostuvo que “sólo” ingirió dos copas en su negocio y que de todos modos ésa no era una razón para haber sido golpeado.

“Como se lo dije a ellos, yo me bebí dos palos en mi negocio pero, hello… claro que yo estoy perfectamente, en regla; sabes que si yo hubiera cometido algún mistake (error) yo no estuviera aquí”, insistió.

El comerciante tenía en las manos una muestra de sangre que le tomaron en el hospital, ya que es diabético, y con la misma pretendía demostrar que no estaba bajo los efectos de bebidas embriagantes.

“Ellos alegan que estoy bajo los efectos del alcohol, pero por alcohol no me denunció. Me hice una prueba de sangre porque es mejor que soplar”, alegó.

No quería soplar

Sin embargo, la versión inicial de la Policía es que Desiderio se resistió a hacerse la prueba de aliento.

“Yo fui voluntariamente y le dije: ‘soy diabético, pues sácame la sangre. Porque tú estés borracho o en cualquier otra condición no merezco que me golpeen eso es lo que yo alego”, repitió Desiderio.

Desiderio negó reiteradamente que se hubiese resistido al arresto.