El concilio de Iglesias de Puerto Rico, a través del reverendo Felipe Lozada Montañez, hizo un llamado al gobierno a que atienda con prontitud las necesidades de las personas que residen en el sur y suroeste, afectadas por los sismos.

"Las necesidades de la gente tienen que ser lo prioritario; establecer procesos que agilicen los procesos para aliviar la vida de las personas, familias y sociedad. Se hace necesario que los gobernantes sean sensibles, así como ágiles en la atención a la problemática que abate a las familias desde hace más de un mes. La sociedad puertorriqueña resiente el trato que reciben las familias y que no puedan sentir que hay un plan efectivo para atender sus apremiantes necesidades", expresó por escrito el líder religioso.

En el escrito, Lozada Montañez sostuvo que "el pueblo necesita tener claridad sobre lo que el gobierno ha de realizar a favor de las personas damnificadas".

“La problemática social tiene que ser atendida con sensibilidad, eficiencia y que se sienta un trato respetuoso y digno”.

El religioso recomendó las siguientes medidas para ayudar a los afectados por los sismos: que se comiencen a reubicar a las familias (alquiler subsidiado, casas reposeídas); demolición, recogido y construcción (preparar “containers” como casa temporera, modelos seguros en diversos materiales) y la apertura de facilidades para educar y brindar seguridad a las familias.