Cosechan su negocio en un mar de girasoles
Finca en Naguabo explora nuevo nicho entre el creciente número de floricultores en la Isla.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 9 años.
PUBLICIDAD
Naguabo.- Todo comenzó como un experimento de estética para embellecer un terreno con potencial para la cosecha de plátano… pero la naturaleza los sorprendió y convirtió a la Finca De Rústica en un gigante y colorido jardín donde se creará un concepto innovador en la Isla en el que los visitantes disfrutarán de una aventura campo adentro al tiempo que formarán parte del proceso de cosecha.
“U pick”, así se le conoce en Estados Unidos y otras partes del mundo a la dinámica que le permite a las personas realizar un recorrido por alguna granja, aprender sobre el proceso de siembra de frutos, vegetales y flores -dependiendo el concepto de cada agricultor- y seleccionar parte de la cosecha para llevarla a sus casas.
“Que yo sepa seremos los primeros con este concepto en Puerto Rico y estamos bien entusiasmados porque sabemos que la gente lo va a disfrutar mucho y eso lo hemos comprobado con los ciclos de visitas que hicimos el verano pasado de forma experimental”, explicó Sofía Cáceres quien junto a su compañero, el biólogo Amaury Ortiz, administran a de Finca De Rústica, ubicada en el barrio Mariana de Naguabo, en unos terrenos donde hace más de 15 años operaba la vaquería San Miguel.
Esta finca es reconocida en redes sociales como Facebook por las impresionantes siembras de girasoles de más de seis pies que decoran el lugar. De hecho, fue precisamente por un interés de estética que la pareja de empresarios se inició en el mundo de la floricultura pues, inicialmente, la idea era fertilizar el área para la siembra de plátano.
“Ya habíamos sembrado los plátanos cuando compramos unas semillas de girasoles con el fin de darle un poquito de color al terreno... pero lo que vimos casi dos meses después nos sorprendió”, expresó Amaury, en alusión a las más de 2,000 flores que impactaron la zona.
“Y ahora, ¿qué hacemos con todos estos girasoles? Si los vendemos a $1 puede ser un buen negocio”, recordó que les dijo a Sofía y a su suegra Janira Nazario (propietaria del lugar) con aquella primera siembra en el verano de 2013.

Para los incipientes agricultores todo ocurrió muy rápido. La inexperiencia en estas lides -pues Amaury es biólogo, Sofía es artista plástica y Janira es siquiátra- los llevó a cuestionarse cuál debía ser el paso correcto a dar en las 10 cuerdas de terreno que forman la finca. Así las cosas, decidieron esperar a que los plátanos dieran sus frutos, los vendieron y luego desistieron de la idea de cosechar esta verdura. El nuevo plan consistía en adentrarse al mundo de la floricultura con la siembra de flores como el girasol, las zinnias, gomphrenas y las gladiolas.
También tienen un área destinada a la siembra de pitahaya, fruta que proviene de varias especies de cactus. Esta siembra se desarrolla gracias a una subvención del Departamento de Agricultura de EE.UU. con el fin de crear una guía sobre el cultivo de esta planta en la Isla.
En la finca se ha invertido por etapas, cada una con un objetivo especifico, destaca Amaury. “Comenzar de cero en la agricultura como nos tocó a nosotros es sumamente costoso. La finca por tener casa y ser plana costó $18,000 por cuerda, mucho más del promedio para esta zona. El equipo, por suerte, lo logramos conseguir directamente de China y nos salió bien barato”, agregó.
Éxitoso negocio
Con el pasar de los meses -y con una sequía que azotaba al país- los floricultores fueron abriendo paso a las cosechas -particularmente las de girasol- en los terrenos que son un hermoso escenario desde donde se puede divisar la falda de El Yunque.
Los agricultores también sacaron beneficio al clima seco y fue entonces que cultivaron sus mejores flores, las que regaban con la poca lluvia que caía en la zona. Esto les abrió las posibilidades de hacer negocio para que un distribuidor local comprara las cosechas y, a su vez, las vendiera en grandes cadenas de tiendas como Walmart, Amigo y próximamente SuperMax.
Aunque actualmente Finca De Rústica se sostiene con las ganancias del negocio con los girasoles a través de estos establecimientos, Sofía y Amaury desean explorar un nuevo concepto de comercialización directa a través del U Pick.
“Queremos que la gente nos visite, disfruten de un recorrido por la finca”, explica Amaury quien vislumbra el “viaje a la finca” como una divertida excursión familiar donde también podrán degustar aperitivos.
Sector en crecimiento
Mientras, el Departamento de Agricultura, evalúa como una “excelente iniciativa” que se fomente el concepto de U Pick en la Isla, considerando que la siembra comercial de flores y productos ornamentales ha ido creciendo en los últimos años, aún con la crisis fiscal que enfrenta la Isla.
Así lo explicaron a Primera Hora Saritza Aulet, directora de Fondos de Innovación para el Desarrollo Agrícola y el agrónomo Arnaldo Astacio, ayudante especial y director del sector de ornamentales al indicar que según las estadísticas de la agencia para el pasado año fiscal el ingreso bruto de este tipo de agricultura fue de más de $39 millones. Para el 2010, las ganancias eran de $33 millones.
“El fuerte de nosotros son las ornamentales con la producción de follaje que se utiliza para landscape. También se producen lo que llamamos flores de tiesto como orquídeas, bromelias, pascuas, palmas, entre muchas otras”, dijo Astacio al agregar que en el país hay unos 173 productores ornamentales que ocupan un total de 1,777 cuerdas para sus siembras.