Moca. La noche antes del accidente que les costó la vida, Abileidys y Edgard Morales Maldonado participaron de un ‘talent show’ en la iglesia Andando en Fe, la cual frecuentaban. Se suponía que el domingo, luego del culto principal, irían a la playa a celebrar junto a sus amigos de la congregación lo bien que les había ido en la noche de talentos.

Pero el sábado 12 de octubre, todo cambió.

Abileidys y Edgard, de 17 y 15 años, respectivamente, fallecieron junto a su hermana mayor, Abigail, de 20 años y quien se encontraba en su quinto mes de embarazo, en un aparatoso accidente en la carretera PR-2.

Diez días después, finalmente familiares y amigos pudieron rendirle sus respetos, luego que sus cuerpos fueran expuestos el martes en el coliseo Juan Sánchez Acevedo ante una multitud que fue a despedirse de ellos.

“Era una familia humilde, dadivosa, muy querida y sobre todo eran unos fieles servidores (del Señor). Ella era una tremenda danzora en el Señor y el joven era un servidor en la casa, además de ser un tremendo pelotero, un prospecto extraordinario”, comentó Heriberto Luciano, pastor de la Iglesia Andando en Fe y amigo de la familia.

“Compartimos con ellos (Edgard y Abileidys) el viernes en un ‘talent show’ de jóvenes en nuestra congregación. Ella danzó y él predicó un cortometraje. Me abrazaron y los felicité”, lamentó el hombre de fe, antes de revelar los planes que tenían al día siguiente y que nunca se concretaron.

Los cuerpos de los tres hermanos llegaron al coliseo mocano poco antes de las 2:00 de la tarde del martes. Los féretros fueron colocados abiertos uno al lado del otro. Abileidys vestía la ropa que solía utilizar cuando danzaba en su iglesia y junto a su cuerpo se exhibió una foto grande; Edgard llevaba el uniforme de pelotero, un bate, y un guante, ya que formó parte del equipo de béisbol juvenil de Moca, mientras que el ataúd de Abigaíl mostraba algunas de sus fotos, un peluche y varias imágenes del sonograma de su bebé de cinco meses.

Sería varón y se llamaría Abraham

El feto, aunque no estaba visible, sí fue colocado al lado del costado de su mamá para ser enterrados juntos, según trascendió.

Al velatorio asistieron varios familiares, incluyendo a su mamá, Sonia Maldonado. Sin embargo, no hicieron expresiones públicas.

“Es un proceso que va a tomar mucho tiempo para sanar y probablemente nunca curar, porque la pérdida de un hijo es otra cosa que no se puede comparar”, comentó, por su parte, el también pastor Gerardo Arroyo, quien fungió como portavoz y amigo de la familia.

Como parte de los actos, se esperaba la presencia del cantante de música sacra Samuel Hernández. También se llevaría a cabo una guardia de honor a cargo de los compañeros de equipo de Edgard y algunos compañeros del grupo de danza llevarían a cabo también un acto en honor a Abileidys.

El entierro de los hermanos Morales Maldonado se realizará el miércoles a partir de las 12:30 de la tarde. La comitiva saldrá de la Funeraria Hernández Rivera en Aguadilla hasta el cementerio Camino Al Paraíso, en ese mismo pueblo, donde recibirán cristiana sepultura.