Dos médicos en la mira

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 17 años.
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Dos médicos que atendían en Puerto Rico a pacientes del cirujano plástico dominicano Roberto Guerrero Daniel podrían ser acusados porque se alega cooperaron para que el galeno ejerciera ilegalmente la medicina en la Isla, según se le acusa.
PRIMERA HORA supo que los dos galenos, uno de Bayamón y otro de Humacao, serán entrevistados por la fiscalía para ver si se convierten en testigos o si se les someten cargos.
De hecho, ayer se pospuso la vista preliminar contra Guerrero porque el fiscal César Mercado Santaella informó que no estaba preparado porque la investigación no ha concluido.
El juez Harry Massanet Pastrana, del Tribunal de Primera Instancia de San Juan, le cuestionó cómo radicó el caso si todavía está investigando, a lo que el fiscal le contestó que si el imputado viviera en Puerto Rico, “tendría todo el tiempo del mundo”, pero tenían que someterle los cargos mientras estuviera aquí.
El cirujano plástico enfrenta dos cargos por violar la ley orgánica del Tribunal Examinador de Médicos (TEM) por supuestamente evaluar a pacientes y realizar procedimientos médicos sin licencia para practicar en Puerto Rico.
La coacusada es la esposa de un primo suyo, Crisbel Pulgar de Guerrero, en cuyo hogar en Cupey el cirujano plástico evaluaba pacientes, según la acusación.
Al principio de la vista, la abogada del cirujano, Jane Hoffman, solicitó al juez que dejara a su cliente regresar a su país para poder trabajar. Massanet Pastrana no pasó juicio sobre eso y pospuso la vista preliminar para este viernes.
“El doctor necesita trabajar para sostener su familia y no puede trabajar en Puerto Rico, como nunca lo ha hecho, y necesita trasladarse a su país”, señaló Hoffman a su salida.
Agregó que Guerrero “nunca practicó aquí y entiendo que no tienen la prueba para sostener un cargo de esa naturaleza”.
“Ya la abogada habló por mí”, se limitó a decir el cirujano a este diario.
Ayer, la sala estaba llena de amistades y pacientes que fueron a apoyarlo, algunos de los cuales viajaron desde la República Dominicana.
“Creemos ciegamente en la integridad del doctor, tanto profesional como personal. A mí él me operó y jamás me vio en Puerto Rico. Me vieron sus amigos colegas que me dieron seguimiento”, expresó fuera de sala Linda Vilorio, mientras mostraba una cicatriz sobre su cadera izquierda.
Guerrero fue arrestado el 1 de junio pasado en el salón de belleza Miranda The Style Lounge del Condado, donde se dijo que evaluaba a posibles candidatas para ser sus pacientes. Se le impuso una fianza de $1 millón porque representaba un alto riesgo de fuga, ya que es millonario y coronel de las Fuerza Aérea Dominicana, pero salió con grillete por $2 mil luego que la Oficina de Servicios con Antelación a Juicio (OSAJ) la difirió.
Una paciente puertorriqueña acudió a las autoridades tras ser intervenida quirúrgicamente en la República Dominicana por el reconocido cirujano plástico.
El 5 de febrero se sometió a una abdominoplastia y liposucción y reconstrucción de senos, pero sufrió complicaciones. Según la perjudicada, Guerrero la evaluó en la casa de la coacusada, fue operada en Santo Domingo y luego el médico le extrajo líquido del área del vientre en un hotel en Santurce.