La Defensoría de las Personas con Impedimentos (DPI) realizó un llamado a la Junta de Supervisión Fiscal para que apruebe un presupuesto donde se considere la asignación de $1.5 millones para la Oficina de Enlace para la Comunidad Sorda, con el fin de “no perder más tiempo y proveer los servicios” para alrededor de 140,000 personas con impedimentos de audición.

El procurador de la DPI, Gabriel Corchado Méndez, hizo el llamado al ente financiero durante una ponencia del Congreso Anual con la Población con Impedimentos, donde reveló que alrededor del 22% de la población de Puerto Rico tiene algún tipo de impedimento.

Según Corchado Méndez, los datos que recopila el Censo Federal bajo el American Community Survey, de una población de poco más de 3,000,000 personas que residen en Puerto Rico, casi 700,000 personas, presenta uno o más impedimentos.

“Aproximadamente 140,000 personas presentan impedimentos de audición, 210,000 personas con impedimentos de visión, casi 300,000 personas con impedimentos mentales y 372,000 personas presentan impedimento de movilidad. Este es el porcentaje más alto de todos los Estados y territorios de Estados Unidos. Esa es una realidad con la que tenemos que trabajar y procurar la equidad”, señaló.

El titular insistió en su intervención que “debemos promover la inclusión de las personas con impedimentos en los quehaceres de la sociedad, sin importar su condición”.

“Nosotros estamos dando la lucha buena por la necesidad de intérpretes para la población sorda, para educar a los estudiantes con impedimentos, eliminar barreras, ayudar en tiempos de emergencia y manejar la crisis de salud mental que ha empeorado durante esta pandemia de COVID-19. Estos son solo algunos ejemplos de las necesidades de nuestra población”, alegó.

Para Corchado, “las minorías a veces se convierten en mayorías silentes que tienen que hallar su propia voz, y por esta razón es que existe la Defensoría de las Personas con Impedimentos, para apoyarlos en su empoderamiento y educar a la población en general de los Derechos que nos asisten.

“Aún queda mucho por hacer, y la Defensoría es solo un soldado más, en ese frente de batalla por la Inclusión e Igualdad, hay otros soldados a los que tenemos que agradecer, que son todas esas organizaciones sin fines de lucro que le dan servicio directo a nuestra población con impedimentos”, finalizó.