Los empleados del cementerio Los Cipreses en Bayamón anunciaron hoy, martes, que seguirán en huelga, pese a un recurso de interdicto radicado por el patrono en el tribunal y la posibilidad de arrestos.

Los 14 trabajadores unionados llevan ocho días de paralización de labores, que incluye los servicios fúnebres y el ornato en la zona, en reclamo de la firma de un nuevo convenio colectivo “justo y razonable”.

“En el día de hoy hemos tomado la decisión que nuestro liderato estará dispuesto a seguir hacia adelante ejecutando el derecho a la huelga y defendiendo el derecho de estos compañeros de alcanzar un convenio colectivo, incluso si conllevaría el encarcelamiento del liderato de la Central General de Trabajadores”, sostuvo el presidente de la unión, José Adrián López Pacheco, en conferencia de prensa.

Según explicó el líder sindical, la Central General de Trabajadores sometió ante el Tribunal de Bayamón una moción esbozando las razones por las que realizan la huelga, en contestación un recurso de interdicto radicado por el patrono.

“Estamos dispuestos a pagar, incluso con nuestra libertad, en aras de que se continúa la lucha y se respete el derecho a la huelga de estos trabajadores para tener la oportunidad de mejorar sus condiciones económicas a través de un convenio colectivo que este patrono les ha negado por el pasado año y medio”, añadió.

Entre los reclamos se encuentran: una revisión salarial de los empleados, una mejor aportación del patrono al plan médico, un alza en el bono de Navidad y que no se violente la antigüedad de los trabajadores.

Los trabajadores también denunciaron la supuesta negativa del patrono a otorgarles botas de seguridad para realizar exhumaciones, enterramientos y traslados de cadáveres y que les protegerían de lo que llaman “agua de muerto”.

“Este patrono abusador lleva siete años sin revisar las condiciones económicas de estos trabajadores”, indicó López Pacheco desde el portón del cementerio.

“Criminalizar” la huelga

Para la Central General de Trabajadores el patrono ha buscado “criminalizar” la protesta y recordaron los procesos judiciales que se han llevado recientemente en contra de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (Utier) por parte de LUMA; la controversia de los camioneros en contra de la compañía V. Suárez que llegó al Tribunal federal; así como la aprobación ayer en el Senado del Proyecto de la Cámara 766 que prohíbe elecciones sindicales mientras se negocian convenios colectivos.

“Esta compañía determinó que no iba a negociar el convenio colectivo y que más allá de eso iba a atacar el derecho a la huelga de los trabajadores. Determinó judicializar, criminalizar, la lucha. De un convenio colectivo para 14 personas, esta empresa, su bufete de abogados, y ojalá que el tribunal no se una, han determinado convertirlo en un ataque legal al derecho de la huelga de un millón de obreros puertorriqueños y puertorriqueñas”, manifestó el secretario de la Central General de Trabajadores, Scott Barbés Caminero.

Los líderes gremiales le exhortaron al tribunal a ordenarle al patrono la negociación colectiva; mientras, se mostraron dispuestos al diálogo, “pero no para entregar derechos”.

“Ya no se trata del convenio colectivo de 14 trabajadores, se trata del derecho de luchar por unas mejores condiciones de vida utilizando el recurso más fuerte y poderoso que tiene la clase obrera, el arma letal contra los abusos: el derecho a protestar”, añadió Barbés Caminero.

En la manifestación estuvieron presentes otros líderes sindicales y políticos como: la presidenta de la Federación de Maestros, Mercedes Martínez; el presidente de la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU), Ángel Rodríguez; la representante del Movimiento Victoria Ciudadana, Mariana Nogales; y Gabriel Casal Nazario, asesor legislativo de la senadora independentista María de Lourdes Santiago.

También hubo representación de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (Utier), la Jornada Se Acabaron Las Promesas y la Brigada Legal Solidaria, entre otras organizaciones.