Muy bien encaminado se encuentra un ambicioso proyecto de agricultura que  pretende establecer en una escuela en desuso, en Aguada, la primera fábrica en Puerto Rico dedicada a la elaboración, distribución y exportación de chocolate derivado de cacao fino y de aroma 100% puertorriqueño.

Se trata de una empresa municipal -impulsada mediante una Alianza Público Privada (APP) entre el municipio de Aguada y la empresa Jeanmarie Chocolat, capitaneada por el agricultor Juan Echevarría- que podría generar al pueblo hasta $3 millones anuales en ganancias.

Así lo aseguró el alcalde, Manuel Santiago Mendoza, al explicar que el proyecto lleva el nombre de JMAM Cacao Project  y su propósito principal es “lograr que lo que un día fue la industria de la caña se pueda convertir en la industria del cacao y, no sólo para beneficio de nuestro municipio, sino para toda la Isla”.

El ejecutivo municipal indicó que el proyecto contempla inicialmente la creación de 30 empleos directos y 90 indirectos que van desde trabajos administrativos hasta de operadores de maquinarias, manufactura, agricultores y agrónomos, entre muchos otros.

Y es que, precisamente, para el alcalde la ilusión detrás del plan es poder minimizar el “preocupante” escenario socioeconómico de Aguada, el cual es un reflejo de la crisis fiscal que atraviesa la Isla.

Detalló que, actualmente, de la población total de su municipio el 54.2% vive bajo el nivel de pobreza. A ese panorama hay que sumarle que enfrenta una tasa de desempleo que ronda el 13.8%.

“El momento de lograr un cambio es ahora porque Aguada es rico en recursos de tierra y tiene el ambiente geográfico perfecto para la industria del cultivo de cacao, pero existe una necesidad educativa sobre el conocimiento agrícola y socioeconómico para ampliar los recursos de sus terrenos”, dijo Santiago Mendoza al agregar que una encuesta hecha a través del ayuntamiento recientemente durante la Feria Agrícola del Valle Coloso evidenció que de 55 agricultores consultados, el 91% tiene interés en conocer sobre la siembra del cacao y el 89% está dispuesto a participar de talleres sobre el proceso.

¿Cómo se logrará?

Para comenzar  a correr el proyecto se estima una inversión de $25,000 para compra de equipo y un capital operacional de $150,000 para los primeros seis meses de funcionamiento de la fábrica que será instalada en la escuela  Gregorio Rodríguez Orama, plantel que fue cerrado el pasado semestre por el Departamento de Educación y que le fue arrendado al municipio por el Gobierno a un precio nominal de un dólar.  

Así lo detalla  la propuesta que preparó el ayuntamiento al Gobierno en la que, al parecer, se ve con buenos ojos  la iniciativa, pues hasta el gobernador Ricardo Rosselló Nevares lo mencionó esta semana en una conferencia de prensa en la que dio a conocer los primeros acuerdos para habilitar planteles clausurados.

Según explicó a Primera Hora Juan Echevarría, quien lleva desde el 2009 cultivando y comercializando el cacao fino que produce en su finca en Aguada, urge avanzar con lo trazado pues importantes chocolatiers del mundo, incluidos algunos de Italia, han mostrado interés en comprar “por toneladas” el cacao  fino y de aroma puertorriqueño. Actualmente, en la isla el cacao fino se produce en cantidades ínfimas, aun cuando hay terreno fértil en toda la isla.

 “La producción internacional de cacao de alta calidad, como el que estamos produciendo aquí, circula entre un 5% y 7% a nivel mundial. Esos datos nos aseguran que la producción en Puerto Rico tendrá una acogida en el mercado internacional a unos precios competitivos. Eso establecería un hecho sin precedente en el sector agrícola de la Isla”, dijo Echevarría, quien invitó a sus colegas y a los empresarios de a visualizar el proyecto en “macro” y destacando sus ventajas en diversas esferas: económico, social, educativo y de autogestión.

Otro dato interesante al que aspira el agroempresario es elevar el plan como una alternativa ecoturística.

La idea es realizar recorridos por las fincas de cacao, que los visitantes conozcan el proceso de cultivo y cosecha de la fruta  y , por último, visiten la fábrica de chocolate y degusten los productos que allí se elaboren por manos puertorriqueñas.

Por el camino correcto 

Puerto Rico tiene todo el potencial de convertirse en un gran exportador de cacao y chocolate. 

Se dice que hace 500 años éramos uno de los mejores productores de cacao.

 Un árbol de cacao puede empezar a producir a los tres años de haber sido sembrado y sus frutos pueden obtenerse hasta tres veces al año si recibe los cuidados adecuados.

 Su sombra y hojarasca controla la maleza y protege los suelos. Convive bien con el plátano, aprovechando la presencia de los mimes que polinizan sus florecitas.

 Aguada, Barceloneta y Las Marías son solo varios de los municipios donde se cosecha actualmente el producto.