Marcela Esther Ortiz Reyes tenía 16 años y Américo Ramos Goitía tenía 82 años.

Ambos son de géneros distintos, crecieron en generaciones diferentes, residían en pueblos distantes, y son parte de las elevadas estadísticas de casos de suicidio generados en Puerto Rico, en el poco más de un mes de lo que va de año.

En total, durante este periodo 29 personas optaron por quitarse la vida, 12 casos más que los reportados para la misma fecha en el 2018. El panorama es angustiante considerando que la tendencia de suicidios es marcada por personas de todas las edades. 

De hecho, según información provista por la Comisión para la Prevención del Suicidio, a través del portal del Departamento de Salud, el suicidio es la tercera causa de muerte violenta en Puerto Rico. 

La agencia advierte que se estima que por cada suicidio consumado, puede ocurrir hasta 20 intentos.

En el panorama actual, datos de la Policía señalan que de los casos investigados hasta la fecha 24 utilizaron el ahorcamiento como método de muerte; otros optaron por el uso de armas de fuego o lanzarse al vacío.

Además, se revela que 24 de los infortunados corresponden al género masculino, siendo el más reciente el de un hombre identificado como Juan Arturo Rivera Morales, quien fue reportado como desaparecido por su familia, en Guayama. Ayer en la tarde su auto fue encontrado en un área boscosa de su pueblo y, poco tiempo después, se halló su cuerpo ahorcado cercano a la zona. 

Según la administradora de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (Assmca), Suzanne Roig, estudios científicos revelan que aunque la mayoría de las personas que se suicidan son varones, suelen ser las mujeres quienes más lo intentan.

“Los estudios indican que la población masculina es la más vulnerable y que tienden a ser hombres entre 45 y 59 años de edad”, explicó Roig al agregar que el 46% de las personas que logran el suicidio lo habían intentado con anterioridad.

Recalcó que el suicidio ha sido por años un tema tabú y adjudicado erróneamente a personas con condiciones mentales, cuando la realidad es que el 5% de la población general en promedio puede tener pensamientos suicidas.

“ Lo hemos querido ligar a condiciones mentales y la realidad es que no. Esta es una situación que le puede pasar a cualquiera. Todos estamos expuestos a tener situaciones tan estresantes que no encontremos alternativas y optemos por el suicidio como opción. Por eso la importancia de atenderlo de manera efectiva”, expresó.

En ese sentido dijo que Assmca anunciará próximamente una serie de proyectos en el que se utilizará el lema “La vida es chula”. Indicó que se trata de una serie de iniciativas que incluyen adiestrar a través de agencias gubernamentales, organizaciones sin fines de lucro y otras entidades a personas que sirvan como respondedores antes situaciones suicidas. En el grupo, señaló, se incluirán paramédicos, policías y otro personal de seguridad.

“Actualmente, tenemos 16 entrenadores -todos empleados de Assmca- que serán los que a partir de marzo comiencen a adiestrar a este grupo durante unos talleres que serán totalmente gratis y se llevarán a cabo durante dos días… nuestro interés es que en cada comunidad de Puerto Rico haya una persona certificada”, manifestó.

Otro proyecto en agenda es inaugurar para el verano un Sistema de Vigilancia – a través de profesionales de la salud mental, organizaciones sin fines de lucro, terapistas y hospitales- en donde se registren los intentos suicidas. El plan daría a la agencia un panorama más claro de este problema en el país y herramientas para agendar iniciativas de prevención de suicidio.

Mientras, expresó que a pesar de las estadísticas ofrecidas por la Policía, en su agencia sólo tienen registrados 11 suicidios en lo que va de año. Pero aclaró que Assmca sólo reporta como número oficial los casos confirmados por el Negociado de Ciencias Forenses, agencia que ha estado en el ojo público en los últimos meses, precisamente, por el retraso en sus funciones ante la falta de personal y equipo necesario para realizar pruebas forenses.

En cuanto a las llamadas recibidas a través de la línea PAS, dijo que durante el mes de enero se reportaron 1,258 intervenciones relacionadas al tema de suicidio, un número relativamente bajo con los 4,458 casos que se atendieron durante el mismo mes en 2018.

“No vamos a parar nuestra gestión. Para nosotros un solo intento suicida o un solo suicidio que ocurra es suficiente para seguir trabajando… sobre todo, durante los meses de verano (mayo a agosto) los cuales históricamente son los de mayor suicidio en Puerto Rico”, explicó al añadir que si se logra reducir esa estadística durante esos meses neurálgicos el año concluirá con muchos menos casos que los reportados el año pasado cuando la curva se elevó a 239 casos, según datos de Assmca. En el 2017 esa cifra fue de 259. 

El suicidio se puede prevenir.  Si usted o alguien conoce está en riesgo de suicidio llame de inmediato a la Línea PAS: 1-800-981-0023.