Juana Díaz.  Cuando Ruthmarie Hernández Torres celebró el nacimiento de sus sobrinos trillizos todo fue alegría hasta que con el tiempo los problemas de aprendizaje la llevaron a pensar que en su escuela no recibieron la atención necesaria para salir airosos.

Fue entonces que tras graduarse de psicología completó un master en atención temprana: prevención, diagnóstico y tratamiento, y otro en neurociencia y cognición en las universidades de Madrid y Navarra, en España. 

A su regreso, Ruthy, como muchos la conocen, se unió a sus hermanos y luego de realizar encuestas en las comunidades juanadinas se dieron cuenta de la gran necesidad que existe en niños, entre los  5 a 16 años, y  crearon Reborn Kids, un centro de tutorías, clases de música y talleres a los padres, ubicado en el sector Peñoncillo del barrio Sabana Llana.

“Yo quería poder aplicar mis conocimientos en esta población que tanto lo necesita”, dijo la joven natural de Bayamón.

Señaló que entre las necesidades que tenían que atender  encontraron:  niños con déficit de atención, autismo, retraso en el desarrollo, dislexia, hiperactividad y memoria a corto plazo.

Al mismo tiempo hallaron que las comunidades cercanas también sufren de deserción escolar, problemas de drogas y desempleo.

“Hemos visto la transformación y el crecimiento de estos niños y eso nos hace sentir muy contentos”, mencionó la también estudiante de doctorado de psicología clínica.

Los cambios positivos en el desarrollo de los participantes también se convierten en transformaciones en sus padres, muchos de los que no encontraban un lugar donde atendieran a sus hijos adecuadamente.

Este es el caso de Iris Martínez, madre del niño Gustavo Meléndez de 7 años. 

Gustavo fue diagnosticado con autismo e hiperactividad y lleva un año asistiendo al centro a tomar clases de piano.

“Un día una persona me dijo que nunca aprendería música y en diciembre mi hijo tocó en su primer concierto”, expresó orgullosa la madre.

Añadió que desde que llegó a Reborn Kids el aprendizaje y carácter de su pequeño han evolucionado positivamente.

Francisco Cruz también llevó a su hijo Marcel de 6 años a las tutorías. 

El niño con autismo funcional cursa el segundo grado y en Reborn Kids su crecimiento educativo y social han dado un drástico cambio para su bien.

“A él le encanta venir, socializa con otros niños y también aprende piano”, comentó el padre, quien elogió el cariño, respeto y paciencia de la encargada hacia cada uno de los niños. 

Actualmente Reborn Kids atiende a 17 menores con diversas condiciones, de comunidades de Juana Díaz y Ponce.

Hernández Torres explicó que además de las tutorías individualizadas y clases de piano y guitarra, brindan talleres a los padres sobre técnicas de estudio, destrezas de comunicación y modificación de conducta.

“Estamos más que satisfechos porque vemos a los padres contentos y el cambio en los niños”, reiteró la especialista en atención temprana.

Esta joven y su equipo se sostienen de donativos de los padres y de otras aportaciones.

Entre los planes futuros de Reborn Kids está crear clubes en las canchas para realizar actividades y prevenir la deserción escolar de las comunidades vecinas. 

Para esto ya están en conversaciones con el alcalde de Juana Díaz, Ramón Hernández Torres.

Además buscan crear un centro para atender niñas y niños desde cero a 6 años que presenten algún signo en su desarrollo y poder recibir la atención que requieren, así como clases de música terapéutica. 

Para información llame al 787-202-1322.