De seguro que son muchos los boricuas que hoy recibieron algún regalo que no les sirvió, o peor aún, no funciona.

En el pasado, muchas personas dejarían pasar esto por alto, pero la situación económica por la que atraviesan la gran mayoría de las familias puertorriqueñas cambia el panorama. Cada vez son menos los recursos financieros con los que se cuentan, así que cada centavo vale.

Aunque resulte tedioso, serán muchos los que se verán en la necesidad de acudir a los comercios a devolver los obsequios recibidos. Esta situación que pudiera parecer cotidiana, equivale a pasar el Niágara en bicicleta si es que no se cuenta con el recibo de compras.

Como explica la secretaria del Departamento de Asuntos del Consumidor, Liza Estrada, "ya casi ninguna tienda acepta la devolución de un producto sin el recibo" de compras.

En estos casos, si la adquisición fue realizada con una tarjeta de crédito, ni el estado de cuenta sirve como facsímil razonable del recibo, explica Estrada.

Lo que demuestra el estado de cuenta es que se adquirió un producto en una fecha determinada. Carece, sin embargo, del detalle específico de qué fue lo que se compró. Además, la política de devolución de gran parte de los comercios especifica que tiene que ser el recibo de compra, lo que limita al consumidor.

La ausencia del recibo, sin embargo, no evita que el consumidor pueda radicar una querella.

Por eso, además de tener el recibo de compras, es conveniente conocer la política de los comercios "antes de elegir el sitio donde usted va a comprar".

"Ahora hay muchísima competencia y muchas tiendas traen los mismos productos y la política de devolución es uno de los criterios más importantes, porque, cuando nos fijamos, el precio es más o menos el mismo, varía a veces por centavos", afirma Estrada.

Además, "la política de devolución es un elemento de competitividad en las tiendas", especialmente si estamos hablando de un "artículo caro".

Por eso, "lo primero que el consumidor tiene que verificar es la política de devolución de la tienda. Van a haber unos letreros cerca de la caja registradora que establecen la política de devolución, en especial la de los productos electrónicos, que es donde más problemas se encuentran", explica Estrada.

Como práctica generalizada, a la hora de la devolución los comercios van a tratar de reparar el artículo que está en disputa. Sin embargo, DACO recomienda que el consumidor sea enérgico.

"El consumidor debe luchar para conseguir que le devuelvan el dinero o se le cambie (el producto) por uno nuevo, si está recién comprado. Porque eso significa que el producto nunca sirvió para el fin que fue adquirido", hace énfasis la secretaria del DACO.

Cuando se acaba el periodo de garantía

Otro caso al que los consumidores se pueden enfrentar es al de a haber agotado el periodo de garantía. Esto se da entre los compradores que adquieren los artículos con mucho tiempo de anticipación previo a la época navideña y luego se las juegan a la hora de tener que devolverlos.

El periodo de garantía que los comercios otorgan pudiera haber expirado antes de que la persona reciba el obsequio. Eso es un "riesgo que se toma el consumidor", explica Estrada.

Con los productos electrónicos, además, hay que tener mayor cuidado. No solamente porque típicamente estamos hablando de artículos que son más caros, sino porque antes de salir del comercio se debe asegurar que el producto funciona.

"Yo recomiendo que cuando se hagan las compras se abra el producto y se pruebe, especialmente los productos electrónicos porque la garantía empieza a correr", afirma la defensora de los consumidores. Pero, "cualquier consumidor que no esté satisfecho con una compra tiene derecho a radicar una querella en DACO", añade.

Aun sin que medie un recibo es posible radicar una querella, como explica Estrada, sin embargo, la situación se torna en una de credibilidad.

"Sería el testimonio de la parte querellante contra el de la parte querellada. Digo que guarden el recibo porque las oportunidades de prevalecer son mayores".

En el caso de las compras por Internet el panorama cambia ya que por regla general DACO no tiene jurisdicción, aunque "ya quisiéramos", expresa Estrada. La excepción a la regla es cuando la página en la que se compra tiene comercios en la Isla.