Camuy. Fue padre y madre para sus tres retoños.

Iris Noemí Ávila Talavera fue una mujer que no se amilanó para levantar a sus tres hijos ni para promover su ministerio en países latinoamericanos donde llegó a ser querida y consiguió la conversión de miles de personas.

Así la recuerda su hijo, Miguel Sánchez Ávila, de 27 años, quien también es evangelista como su madre y su abuelo Yiye Ávila.

Sánchez Ávila llevó a su mamá al aeropuerto hace una semana desde donde partió hacia Venezuela y, hace unos días, ésta lo llamó contenta por los logros que había conseguido.

“Llamó muy amorosa, como era ella”, comentó el evangelista a Primera Hora.

No obstante, en la república bolivariana la pastora puertorriqueña de 56 años encontró la muerte el martes cuando el auto que conducía al parecer patinó y se volcó en una vía que conduce de Maturín a Anaco, en Venezuela.

“Ella era la que estaba ahí para nosotros. Hizo el papel de padre y madre”, comentó Sánchez Ávila cuando se le preguntó sobre su madre que se divorció hace muchos años.

En el auto viajaba también una amiga de la pastora identificada como Yanetcy Estílin Martínez, quien resultó herida. La perrita Kendy, que iba en el auto, murió junto con su ama.

Además de Miguel, de 27 años, la pastora puertorriqueña era madre de Sulabel Nicole, de 26, y de Sunaholy Shekina, de 24.

Ávila Talavera tenía un doctorado en Ministerio y Consejería. Fundó su Ministerio Sed Lleno del Espíritu Santo, el que la llevó a viajar por varios países promoviendo el evangelio.

“Era una persona muy entregada a Dios, muy ejemplar”, dijo su hijo, quien comentó que su madre quería mucho a Venezuela.

Asimismo, líderes del Ministerio Cristo Viene afirmaron que a pesar del dolor por la muerte de su hija, el evangelista Yiye Ávila se siente tranquilo porque sus creencias religiosas le convencen de que la segunda de sus retoños se encuentra ahora con el Señor.

José Joaquín Ávila, a quien todos conocen como Yiye, de 83 años, se encontraba ayer en su hogar en Camuy junto con su esposa Carmen “Yeya” Talavera, en espera de noticias sobre el traslado del cuerpo de su hija. Es la segunda vez que Ávila pierde a una hija.

“Queremos pedirle al pueblo que ore por su familia para que Dios los fortalezca en esta prueba difícil que están viviendo”, dijo Tommy Figueroa, vicepresidente de la Junta del Ministerio Cristo Viene.

El hijo de la pastora señaló que hoy un grupo de la familia viajará a Venezuela y otro el domingo para coordinar el traslado que esperan pueda darse el próximo miércoles.