Floja la temporada huracanada en 2009

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 16 años.
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Puerto Rico volvió a salvarse de sufrir el embate de un huracán, pero vaguadas provocaron fuertes aguaceros que dejaron inundaciones a su paso.
Ayer finalizó la época de huracanes 2009, la cual fue menos activa que lo normal, con apenas nueve tormentas tropicales, tres huracanes y dos de gran intensidad.
El subdirector del Servicio Nacional de Meteorología (SNM), Rafael Mojica, destacó que el efecto de El Niño ayudó para que no se formaran tantos sistemas atmosféricos.
Recalcó que se considera una temporada bajo el promedio, que son 11 tormentas, seis huracanes y dos huracanes fuertes.
“Afortunadamente, esta temporada, para beneficio de nosotros, República Dominicana y el resto de las Antillas que fueron afectadas en las pasadas temporadas, ha sido un año para cargar baterías. Pero no sabemos qué podemos anticipar y debemos establecer una cultura de preparación”, manifestó Mojica.
Indicó que ésta fue la temporada más tardía desde 1983, ya que la primera tormenta tropical, Ana, se formó en agosto, cuando por lo regular comienzan a desarrollarse en junio.
“Lo normal es que en junio se forme una tormenta, y nada. Eso ya era indicativo de que la temporada sería lenta”, dijo.
En Puerto Rico, Ana y Erika amenazaron con pasar por el área. Mojica señaló que vientos cortantes ayudaron a que las tormentas tropicales Ana y Erika no impactaran directamente en agosto y en septiembre, respectivamente. Pero ambas dejaron lluvia a su paso y Erika provocó inundaciones y derrumbes.
Mojica y el director ejecutivo de la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastre (Aemead), Heriberto Saurí, recalcaron que no hace falta que pase una tormenta o un huracán para causar problemas, como se demostró con las vaguadas registradas en las últimas semanas.
Saurí aseguró que, aunque se registraron pérdidas recientemente por eventos de fuertes lluvias en poco tiempo, específicamente en Hatillo, Utuado, Cataño, San Juan y Guaynabo, están listos para cualquier eventualidad. Agregó que los gobiernos municipales se han preparado mejor que en años anteriores.
“Llevamos 11 años que no nos afecta directamente un huracán (desde el paso del huracán Georges en 1998). Sin embargo, durante este año, nos vimos afectados por varios episodios de lluvia intensos”, indicó Saurí, quien hizo un llamado a la ciudadanía a nunca bajar la guardia, ni siquiera al terminar la temporada.