Los contagios y fallecimientos producidos por el virus AH1N1, conocido originalmente como la gripe porcina, han logrado captar la atención de los medios de comunicación masiva. Pero éstos no son los únicos.

En Puerto Rico, el grafiti también se ha hecho eco de la alerta mundial.

Con sus características herramientas de difusión -paredes de fácil visibilidad y colores llamativos-, un grupo de grafiteros de Villa Palmeras, Río Grande, Caparra y el residencial Mirador, en Santurce, se adueñó de una extensa pared en la avenida Eduardo Conde, en Santurce, para propagar a su forma un mensaje de prevención.

Al igual que en Bremen, Alemania, la estatua de un cerdo es tapada con una mascarilla como medio de alerta, los grafiteros utilizaron el lienzo urbano para prevenir el contagio a través de dibujos que evocan imágenes que han dado la vuelta al mundo: un policía y una bebé con mascarillas y un ciudadano leyendo un periódico con titulares que hablan del impacto y el carácter de epidemia del virus.

Células, medicinas de Tamiflu e imágenes de lechones completan la colorida pieza de arte.

“Se debe concienciar al público de los métodos que se deben buscar para evitar que (la gripe) se siga expandiendo por el mundo”, comentó a Primera Hora el grafitero Bad Six, originario de la idea, quien contó con el apoyo de sus compañeros Germ, Rey C2, Abit y Mr. Dad One.

“Es un modo de hacer ver a la sociedad que (el virus) está presente, que es inminente y que hay que buscar la manera de evitar eso en Puerto Rico”, agregó.

Y es el grafiti el medio utilizado para que muchos, tanto los transeúntes como los conductores que a diario pasan por la concurrida avenida, tomen conciencia de la enfermedad.

En la Isla, hasta el momento, hay tres casos que dieron positivo a la influenza A y fueron enviados al Centro federal para el Control y Prevención de Enfermedades en Atlanta para confirmar si se tratan del virus AH1N1.