Su pasión es la aviación. Su gran anhelo, entre  otros tantos, convertirse en piloto comercial.

Familiares de Rigoberto López Colón, el copiloto puertorriqueño  que permanece desaparecido luego de sufrir un accidente aéreo en la vecina isla de San Martín, guardan en su corazón el anhelo de que el joven de 26 años sea hallado con vida.

Desde su arribo al vecino país, estos se han dado a la tarea de contactar a las instituciones hospitalarias de la zona con la esperanza de que  se haya salvado.

“Estamos llamando a hospitales, pero nada, con la esperanza de que se haya salvado”, expresó su tío  José Colón, quien junto al padre y la novia del joven se trasladó a la isla de San Martín  para completar los trámites relacionados a los trabajos de rescate y  recuperación. 

Ayer en la noche las labores de rescate permanecían detenidas debido al mal tiempo que imperaba en la zona. De hecho, las condiciones climáticas  están deterioradas desde el miércoles, día del accidente, lo que ha levantado el cuestionamiento de por qué se les permitió a los pilotos salir desde San Martín con destino a Puerto Rico.   

Según los reportes de prensa de   medios de San Martín, el accidente   ocurrió la tarde del miércoles  a eso de las 6:48 p.m.,  a dos o tres millas de la costa de la isla, luego de despegar del aeropuerto Princess Juliana de San Martín con destino al aeropuerto internacional Luis Muñoz Marín, en Carolina.  

La avioneta de carga,  modelo SHORTS SD3-60, era pilotada por el alemán Eric Schnell y López Colón iba de copiloto.

El cadáver de Schnell -el cual fue llevado a la sede de la Guardia Costera- fue encontrado poco después del incidente, a eso de las 10:20 p.m., entre la bahía Mullet y la playa Cupecoy, confirmó  Goedemeur Roderick,  portavoz de la Guardia Costanera en la región de Curazao.  

La primera alerta sobre lo sucedido  las autoridades  la recibieron alrededor de las 9:30 de la noche debido a los escombros que quedaron en la zona como consecuencia del accidente, lo que también fue un indicio de lo fuerte que fue el incidente.

“Su pasión era la aviación. Ahora mismo la novia me decía que él acostumbraba a ir al aeropuerto a ver los aviones despegar. Era disciplinado, alegre y le gustaba compartir en familia”, dijo Colón.

Su cuenta de Pinterest era un reflejo de la intensidad con la que López Colón vivía la aviación, pues allí compartía imágenes de aviones de todo tipo.   

Hace un año que López Colón comenzó a trabajar para Sky Way Enterprises, compañía con base en Miami, con la intención de completar las horas de vuelo requeridas para  volar a nivel comercial.

Usualmente volaba desde o hacia Puerto Rico, San Martín y República Dominicana para Sky Way  Enterprises, operadora de FedEx en la zona. “El estaba bien encaminado en lograr su anhelo”, relató. 

Recordó que los fines de semana su sobrino disfrutaba de conocer nuevos lugares de la Isla. “Me llamaba y me preguntaba: ‘Tío, ¿tú fuiste a ese restaurante?’. Los fines de semana   se las pasaba entre restaurantes y chinchorros”, expresó al agregar que la familia está devastada por lo ocurrido.

Previo a dedicarse a la aviación, López Colón trabajó en una pizzería propiedad de la familia. 

En el momento que la familia arribó a San Martín, después de las 3:00 p.m. del jueves,  las labores de recuperación ya estaban detenidas. La mayor dificultad para las autoridades era el  fuerte oleaje en la zona.

“Perdió poder en los motores y los frenos, por lo que no pudo terminar el proceso de despegue y terminó en el mar. El vuelo salía a las 6:33 p.m. y  se supone que llegaría a Puerto Rico a las 7:28 p.m. Este vuelo comúnmente ocurre la mayoría de los días de la semana”, detalló el director del Negociado de Aviación de la Autoridad de Puertos, Rolando Padua. 

El Departamento de Estado, de inmediato, se contactó con la familia para asistirlos en cualquier situación que pueda surgir.

Primera Hora contactó las oficinas de Sky Way Enterprises, en Florida, pero las solicitudes de una reacción sobre lo ocurrido no fueron contestadas.  

Medios de comunicación reportaron que el accidente sigue a otro ocurrido dos días antes en el Aeropuerto SXM, en el que se sospecha estuvo involucrado el mismo avión. La avioneta, según reportes de prensa, tuvo problemas en el aterrizaje, lo que provocó que girara a la izquierda en la pista y que por poco golpeara un bunker de combustible. La aeronave había sido objeto de reparaciones durante los últimos dos días.

La Administración Federal de Aviación  (FAA) se hará cargo de la investigación del accidente.