En la Península de Cantera hay una estructura que se impone ante las demás. Es muy colorida y en su interior lo que se puede divisar a simple vista es la alegría de los niños que hasta allí llegan diariamente.

La bautizaron como la Casa Educativa y fue levantada a petición de los propios niños de la comunidad a la Compañía para el Desarrollo Integral de la Península de Cantera, corporación pública cuya misión es mejorar la calidad de vida de los 16 sectores que la componen. 

A través de sus proyectos educativos, funciona como un after school para asistir a niños y niñas entre los 4 y 14 años para hacer sus tareas, pero su labor social y comunitaria trasciende al hacerlos conscientes de sus derechos y los de los demás, la autogestión y la inclusión, entre otros aspectos para una sana convivencia.

Dentro de su estructura, los participantes -que deben ser residentes de la comunidad o estudiantes de las escuelas aledañas Fray Bartolomé de las Casas y Manuel Elzaburu y Vizcarrondo- utilizan el juego y la música como instrumentos de aprendizaje. 

Para reforzar su ofrecimiento, y ante la petición de un trabajador social por parte del Consejo Vecinal, implementaron la Juegoteca.

El proyecto se desarrolla como parte de su programa Jugando al Derecho, subvencionado con fondos federales VOCA del Departamento de Justicia para niños de la comunidad, y víctimas del crimen, a quienes también se le ofrecen servicios de sicológicos.

Con este método educativo, la Casa Educativa se convirtió en la primera biblioteca de juguetes acreditada por la USA Toy Library Association y el International Library Association, luego de dos años trabajando para cumplir con sus requisitos. 

La Juegoteca consiste de tres espacios, dos estáticos -una comunitaria y otra escolar-, ubicadas una en la propia Casa Educativa y la otra en la escuela Fray Bartolomé de las Casas, así como una móvil.

Las Casas recorre varios de los sectores que comprenden la Península de Cantera.

“Lamentablemente, el país vivimos constantemente incidentes de violencia y la comunidad no es la excepción. Entonces si hay una muerte por el asunto del trasiego de drogras dentro de la comunidad, pues eso trae unas implicaciones tensas en los espacios. Muchas veces ese fallecido es el papá, el tío, el primo de uno de los participantes, porque este es un barrio donde todos se relacionan, son familia. Así que ante los estresores que genera la violencia en general y que una de esas violencias es la pobreza, pues trabajamos con los fondos de víctimas al crimen de forma directa e indirecta y creamos tres juegotecas”, explicó Francine Sánchez Marcano, directora de la Compañía para el Desarrollo de la Península de Cantera.

Según la facilitadora lúdica Heidi Báez, en el espacio se ha identificado material intencionalmente seleccionado para que los niños puedan jugar y establecer acuerdos de conducta y reglas. 

“El juego nos permite conocer la visión de mundo del niño, cómo ve las cosas, cómo se relaciona con los demás, que está sintiendo, qué sabe, qué no sabe, cómo explora. Así que en ese espacio tenemos la oportunidad de recoger información y en las próximas secciones lo que hemos identificado que necesitan reforzar, pues lo trabajamos con juegos semidirigidos”, comentó Báez.

La Casa Educativa atiende diariamente 52 niños en sus estudios supervisados y ahora en el verano son unos 80.

 En tanto, la Compañía para el Desarrollo de la Península en conjunto con el Consejo Vecinal compuesto por dos miembros de cadas uno de los 16 sectores que componen la Península de Cantera sirve a más de 10,000 habitantes mediante el pareo de dinero federal y estatal que proviene de la EPA, del Departamento de Justicia a través de los fondos VOCA y de AmeriCorps.

“Queremos niñas y niños felices, que la pobreza no le robe la felicidad, ni el acceso a los derechos básicos, como lo es la educación, la recreación y el juego, porque los adultos, lamentablemente, piensan que el juego es una pérdida de tiempo y el juego es un recurso extraordinario, y un recurso social donde el niño aprende destrezas de relacionarse, destrezas sociales, el compartir y también refleja lo que vive, experimenta y sus ansiedades a través del juego. Para eso nosotros tenemos profesionales, para que puedan manejar eso dentro del espacio”, sostuvo Sánchez Marcano.

Sin embargo, toda esta estructura educativa se ve amenazada si se mantiene el recorte que contempla el gobierno en fondos estatales para esta entidad. La partida presupuestaria recomendada para el año 2019-2020 sería de $338,000, una reducción de unos $43,000.

Según Sánchez Marcano, la corporación también está dentro de la lista de corporaciones que pudieran ser eliminadas, incluso con un término de caducidad al 2033.