Ponce - El representante Nelson Torres Yordán recorrió el centro comercial Plaza del Caribe junto a funcionarios del Departamento de Asuntos al consumidor (DACO) para inspeccionar que todos los comercios cumplieran con la ley y que los clientes hicieran sus compras sin problemas. 

Explicó que visitaron la juguetería Toys R’ Us donde le exigieron retirar el especial debido a que la mercancía estaba disponible en la tienda de Mayagüez. 

“Se otorgaron dos multas a Radio Shack por no tener los artículos rotulados”, mencionó el presidente de la comisión de Asuntos al Consumidor de la Cámara de Representantes. 

Igualmente, indicó que en la tienda Walmart había varios clientes molestos porque no había suficientes televisores. “Se fueron 354 televisores en ocho minutos”, añadió. 

El flujo de clientes comprando, cuyas tiendas han ido abriendo poco a poco, ha disminuido y continúa tranquilo y sin incidentes violentos. 

La administración del centro comercial ofreció junto a una empresa de ollas asopao para los asistentes, quienes se acercaban a calentarse y recargar energías para seguir comprando. 

Empleados del Negociado de Impuesto al Consumo del Departamento de Hacienda también estuvieron visitando las tiendas donde verificaron que cumplieran con el cobro y pago del IVU.

Mientras, las puertas de la tienda Sears abrieron a las 12:01 y de inmediato los empleados de seguridad permitieron la entrada de grupos de 25 clientes.

Previamente, todos los que hacían fila fueron marcados con un sello que los identificaba como clientes. A esos clientes se les garantizaba el artículo en especial por una hora. 

El gerente general José Capeles describió esta venta como una mucho mejor en comparación con años anteriores. 

“Ha estado más organizado, colocamos vallas que permitieron el control y acceso seguro a la tienda”, comentó el gerente.

Este aseguró que cuenta con suficiente mercancía para suplir la demanda y añadió que los especiales aplicaban para el layaway. 

Uno de los primeros en salir con todo lo que buscaba fue Luis Feliciano, quien llegó a las 9:30 desde Guánica. 

“Compré un playstation, un teléfono y una cámara y me ahorré más de lo que esperaba”, comentó satisfecho el cliente. 

Las personas llegaron a comprar desde televisores, hasta almohadas y batidoras. 

El acceso hacia las otras áreas del centro comercial se esperaba abriera a la 1:00 am. 

Miles de ciudadanos llegaron a distintas tiendas como parte de la tradicional venta del Viernes Negro.