A un año de la pandemia del coronavirus, la disposición de mascarillas tanto en los zafacones como en las calles y playas del País se han convertido en un “problema grave”, a juicio del biólogo del Programa de Vida Silvestre del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), Carlos Diez.

Sin embargo, ambientalistas alertaron de otros panoramas más perjudiciales para el medio ambiente en este tiempo de pandemia. Se trata de un aumento de generación de basura doméstica, asociada principalmente al desecho de plástico y cartón, así como a una dramática reducción en el reciclaje.

Las mascarillas desechables, como las quirúrgicas y las N95, no representan todavía ni un 1% de los desechos que se generan en el País, comentó la consultora ambiental, Maribelle Marrero Vázquez. Pero, su uso recurrente para evitar los contagios por coronavirus y la mala disposición que se ha tenido de esta basura ha provocado que ahora se vean tiradas en todos lados.

“Como se ha vuelto un material de uso diario para todos, como cuestión de protección ante la pandemia, lamentablemente se ha convertido objeto que se encuentra en las calles o cuerpos de agua, porque la depositan incorrectamente o posiblemente se les cae”, expuso Jessica Siegle, de la organización ambiental Basura Cero.

Este problema no es solo de Puerto Rico. La directora de Scuba Dogs Society, la bióloga marina, Ana Trujillo, señaló que el tema sale a relucir en los conversatorios que se hacen en las alianzas mundiales que participa.

“El llamado a las personas es que, por favor, número uno, haga una disposición adecuada de esas mascarillas, porque al ser tan liviana, el viento la desplaza a grandes distancias y finalmente, como sabemos, todo aquello que está en las aceras o arena va para el fondo del mar y allí es más difícil hacer una limpieza. En lo posible, usar mascarilla reusable”, recomendó.

Además de ser un contaminante, estas mascarillas desechables se han convertido en un problema para la naturaleza.

“Las mascarillas tienen tirantes alrededor de la oreja que puede provocar que animales se queden atascados. Podría ser confundido por agua viva y las tortugas las pueden estar ingiriendo. En el caso de animales más grande, como las ballenas, ellos abren la boca y succionan. Ahí podría irse las mascarillas en los estómagos”, explicó Siegle.

También las mascarillas pueden ocasionar que se tapen los desagües pluviales en las carreteras y crear inundaciones urbanas, comentó Marrero Vázquez.

Uno de las complicaciones que Diez entiende que tienen estas mascarillas es que todavía no se ha encontrado la manera de reciclarla. Por ello, el experto del DRNA pidió conciencia ciudadana para lograr una buena disposición de estas mascarillas.

Entre los consejos que dan los ambientalistas está el cortar los tirantes de las orejas, así como disponer de ellas en el zafacón.

“Lo principal no es dejarla tirada por ahí, ya sea en playa, bosque, porque tiene el mismo impacto si la deja en una carretera, en una acera de Viejo San Juan, en la playa o en un río en El Yunque. Hay que tratar de ponerla en un sitio seguro y se evaluará si hay un plan de reciclaje para este tipo de desperdicio. La mascarilla es algo que se está añadiendo ahora, pero la basura es basura y la basura es un problema más grave que las mascarillas”, indicó Diez, al comentar que una bolsa o vaso plástico hace igual daño a la naturaleza.

De hecho, Marrero Vázquez hizo constar que, aun cuando estas mascarillas se han tornado en un desperdicio emergente en estos tiempos de pandemia, la realidad es que no constituye todavía ni un 1% de la basura que se genera en el país.

“Las mascarillas como problema de volumen no son tan significativo como otro que voy a mencionar. La gente ha recibido dinero y está en sus casas. Hay dos renglones que está aumentado los desperdicios. Uno es por desperdicios por alimentos preparados. La gente está en las casas y piensa deben cocinar más, pero no es así. Hay mucho consumo de snack con los niños en casa y ha aumentado los desperdicios de fuente de hogar en un 15%. ¿Qué significa eso para un municipio o una compañía? Las rutas se aumentan, se duplican los costos y la basura aumenta. La del comercio ha bajado. Pero, la del comercio se clasifica y se paga por ella. Para los municipios, se les aumenta los costos (de recogido), sin presentar aumento de ingreso”, explicó la funcionaria que por cerca de 20 años laboró en una empresa de recogido de desperdicios.

Explicó que en los vertederos se está observando mucho vaso plástico y platos desechables.

También señaló que ha aumentado la llegada a los vertederos de escombros, porque las personas has renovado cocinas, baños y otras partes del hogar, así como compran electrodomésticos nuevos.

“Eso es desperdicio pandémico que no están relacionado a la pandemia, pero sí a la situación económica”, dijo.

Para agravar el panorama, “en el reciclaje estamos similar a María o peor. La gente no está recibiendo la información y hay municipios que ni siquiera están dando el recogido de reciclaje como antes”, denunció Marrero Vázquez.

Se supone que la meta de reciclaje en la Isla es un 35%. Antes de la devastación causada por el huracán María, la cifra rondaba en un 12%. Actualmente, “rondamos en un 10%, con suerte. Y un 10% en reciclaje en una Isla que consume tanto, es un poco difícil”, añadió la experta.

De hecho, Trujillo señaló que en la limpieza de playas que realizan lo más encontrado son materiales que se pudiese reciclar. De hecho, indicó que 8 de los 10 productos más encontrados son plástico. El primero lugar lo ocupan las colillas de cigarrillos y el décimo representa botellas de cristal.

Todavía las mascarillas no tienen una posición en estos 10 desperdicios más encontrados en la playa, según aceptó.

La directora de Scuba Dogs Society pidió a las personas que para disminuir la llegada de basura a los cuerpos de agua se debe llevar menos cosas a la playa, ríos o parques. Dijo que la reducción siempre es lo más efectivo.

Como segunda recomendación, Diez y Trujillo llamaron a las personas a no dejar basura en ningún área natural, aun cuando haya zafacones disponibles. Pidieron llevarla a casa para lograr una disposición correcta.