A modo de protesta e inconformes con la evaluación realizada por el ingeniero estructural que certificó la escuela como apta para comenzar las clases hoy, padres decidieron no enviar a sus hijos a clases esta mañana en la escuela Antonio Ledée Colón en Salinas.

Ante la inseguridad que le provoca enviar a sus vástagos a una escuela que tiene salones con grietas considerables y una sola puerta de salida, así como unas estrechas escaleras para desalojar una matrícula de más de 200 estudiantes por que la rampa que posee está clausurada por evidentes daños estructurales, los mantuvieron en sus casas y ellos salieron a exigirle al Departamento de Educación una nueva opción de enseñanza.

Por la parte de afuera del plantel también se pueden observar a simple vista varillas luego que se desprendiera parte del concreto de los techos.

Aun con el panorama, ayer en una asamblea de padres convocada por la directora Norma Hernández y la superintendente auxiliar Blanca Estrella, se les dijo a los padres que la escuela estaba apta comenzar las clases hoy. Sin embargo, a la 7:55 sonó el timbre pero nadie entró a la institución educativa que acoge a estudiantes de sexto a octavo grado.

“Las personas que nos dirigen y dirigen estas agencias tienen que aprender a hacer la cosas bien. A analizar bien las cosas, a tomar decisiones sabias, correctas, porque muchas veces, actuando de la manera en que actúan, violentan nuestros derechos, nuestra dignidad y nosotros nos sentimos humillados, atropellados. Esto es una falta de respeto por parte del Departamento de Educación e incluso de la directora que, aun viendo cómo están las condiciones de la escuela, decidan que hoy era el inicio de clases. Así no podemos pretender que nuestros estudiantes y la ciudadanía tenga calidad de vida, las cosas tienen que mejorar”, apuntó Ágela Colón, madre de una de las estudiantes del plantel.

Según Colón, durante la asamblea le solicitaron a la directora el plan de desalojo y mitigación de la escuela pero ninguno de los dos fue entregado a los padres presente. Incluso, el plan de desalojo fue preparado por los mismos miembros del plantel y no por las agencias correspondientes de Manejo de Emergencias.

“Como madre, buscaría otras alternativas y ya estoy evaluando el homeschooling, pero el departamento tiene el deber de respondernos y encontrar soluciones a la problemática para eso están, para eso reciben $3.2 billones al años en fondos estatales y federales. ¿Qué hacen el dinero, a dónde se dirige?”, indicó Colón.

Vonmarie Martínez, fue de las madres que se unió a la protesta de padres y no envió hoy a sus hijo Sebastián Joel Rivera Bermúdez ante el miedo que le provoca que, su hijo siendo estudiante de educación especial, de surgir un evento telúrico, tenga una crisis y la maestra no pueda manejarlo por que no cuentan con un plan adecuado de evacuación de los estudiantes. El plantel, además, solo cuenta con una maestra de Educación Especial.

“Mi mayor preocupación es mi hijo que es de Educación Especial y aquí los maestros tienen 25 a 30 estudiantes y en una emergencia, si no hay un proceso de desalojo correcto, ¿cómo los maestros van a lidiar con 25 a 30 estudiantes y cinco y seis estudiantes de Educación Especial al mismo tiempo que vayan a entrar en una crisis?”, cuestionó.

“Por ejemplo mi hijo que pueda entrar en una crisis porque le sucedió en el evento del 7 de enero , ¿cómo esa maestra sin un plan de desalojo, sin unas verdadera salidas de emergencia adecuadas, cómo van a lograr manejar esta situación?”, añadió.

Los padres, sostienen que durante la asamblea se le plantearon otras alternativas para que los niños puedan iniciar el semestre fuera de la escuela, pero alegadamente la directora se mantuvo en la negativa porque entiende que el plantel está en condiciones de iniciar las clases. Incluso, Martínez, indicó que la funcionaria alegadamente les advirtió que “niño que no venga, niño que ella cuelga y no va a pasar de grado”.

Por otra parte, personal docente de la escuela, que prefirió no identificarse, confirmó que tiene miedo de regresar al plantel por las condiciones en que se encuentra el plantel.

“Hay partes que estaban así, pero hay partes que han empeorado y hay partes nuevas”, señaló.

“Personalmente a mí me gustaría que volvieran a revaluar, que hagan una inspección nueva”, dijo.

Según la funcionaria, hay áreas que han descendido en los techos, “pisos que se nota que también han bajado grietas más grandes que existían”.

Como medida preventiva, los padres indicaron estar dispuestos a recoger el material para estudiar con sus hijos y se mostraron abiertos a otras alternativas como clases por internet o bajo carpas y vagones. También instaron al Departamento de Educación a evaluar la Escuela Parcelas Vázquez que fue cerrada durante la incumbencia de la exsecretaria Julia Keleher.

Hasta la manifestación llegó la alcaldesa de Salina, Karilyn Bonilla, quien les comentó a los padres que le solicitó al Departamento de Educación una reinspección del plantel que alegadamente se realizaría hoy.

“Entiendo que el Departamento más allá de hacer una evaluación de daños como nos han informado, que están haciendo una inspección ocular para determinar si la escuela tuvo daños o no, yo entiendo que el Departamento debe hacer un examen exhaustivo forense para determinar si las escuelas requieren mejoras para mitigar eventos futuros”, señaló.

“Exigimos que elabore planes de emergencia de la mano con el personal del Manejo de Emergencias Estatal, se manejen los riesgos y que puedan pone ren práctica planes de desalojo conforme a la reglamentación. Los directores de escuelas son los que han hecho los ples y yo entiendo que lo hacen el mejor ánimo de mantener un control pero yo entiendo que aquí eso planes deben ser preparados por profesionales debidamente certificados”, dijo.