Cabo Rojo. Hace unas semanas, una turista que se encontraba en el balneario de Boquerón resultó con contusión craneal y fractura en la nariz luego que un coco le cayera encima mientras se cobijaba bajo una palma.

La información fue confirmada por el superintendente de la Compañía de Parques Nacionales en el balneario, José Orlando Rodríguez, a quien se le preguntó cuándo fue el último incidente. “Hace dos semanas, a una señora le cayó un coco en la cabeza, pero está bien”, dijo.

Una lectora de Primera Hora había alertado sobre el peligro que representaban las palmas del balneario que estaban cargadas de cocos, que en cualquier momento podrían caer sobre los bañistas.

Ante la denuncia, ayer Parques Parques Nacionales activó a su personal y pidió ayuda de brigadas municipales de Obras Públicas de Mayagüez y Cabo Rojo.

Inmediatamente, el personal –respondiendo al llamado de seguridad– tumbó los frutos y podaron las palmeras.

Los ciudadanos que disfrutaban de un día soleado en el balneario se acercaban para llevarse los cocos.

Rodríguez señaló que la persona que antes recogía los cocos de las palmas dejó de ir hace poco más de un año porque no cumplió con los requisitos y permisos de responsabilidad pública.

Se dijo que, durante este mes, cuando miles de ciudadanos llegan hasta el balneario para disfrutar los feriados de julio, se seguirá atendiendo el recogido de los cocos para evitar exponer a los visitantes a un golpe innecesario y potencialmente fatal.

Rodríguez estimó que diariamente se recogen del suelo cerca de 200 cocos, de los que algunos pueden ser utilizados para comer.

Tres camiones grúa (sky masters), un camión compactador y un camión para recoger las ramas fueron utilizados para los trabajos.

La coordinadora de Parques Nacionales en el oeste, Marisel Mora González, destacó que los cientos de cocos recogidos ayer por las brigadas de emergencia serán destinados a los animales del Zoológico de Puerto Rico Dr. Juan A. Rivero, el cual tiene también bajo su dirección en Mayagüez.