JUNCOS- A lo largo de sus 24 años de existencia en la Isla, el movimiento internacional Juventud con una Misión (Jucum) ha capacitado como misioneros a 2,192 jóvenes de distintas denominaciones cristianas, procedentes de Puerto Rico, Estados Unidos y Latinoamérica.

Para algunos líderes religiosos, sin embargo, el movimiento es totalmente desconocido; pero otros destacan lo positivo que la organización ha sido para los y jóvenes.

Los participantes de Jucum, fundado en el 1960 por el estadounidense Loren Duane Cunningham, se internan por meses o hasta tres años en la sede del movimiento en Juncos para tomar cursos que los llevarán a la segunda etapa: realizar misiones en Puerto Rico y otros países.

Éstos desarrollan su carácter al conocer sobre la naturaleza y carácter de Dios, y aprenden sobre relaciones y apologética, entre otros temas. Además, son educados para preparar clases tras tomar cursos relacionados con la capacidad espiritual de la niñez, el crecimiento y el desarrollo humano.

Los cursos se dividen en tres escuelas; las primeras dos duran seis meses y el periodo de viajes ocurre durante tres de los seis meses, en los que viajan hasta un máximo de tres naciones, dijo la directora Yarley Niño, junto a jóvenes que compartieron sus experiencias con PRIMERA HORA. El tercer periodo, que incluye estudio de la Biblia, tiene una duración de dos años.

“Es un ministerio de esperanza que en Puerto Rico ha ayudado a muchos jóvenes”, expuso el reverendo Ángel Marcial, ex presidente de la Fraternidad Pentecostal de Puerto Rico (Frape).

“Jucum es una alternativa para los jóvenes, se sensibilizan con necesidades en Puerto Rico y el mundo”, agregó el actual obispo de la Iglesia de Dios del Sureste de Estados Unidos.

JUCUM tiene presencia en 149 países, en más de 1,000 localidades y cerca de 16,000 personas forman parte del grupo de trabajo, según la página en la Internet de la organización (www.ywam.org).

En los países de Asia Central, Kazajstán y Kirguizistán, y en China, al este de Asia, los jóvenes se limitan a enseñar inglés, ya que esos gobiernos no les permiten entrar como misioneros cristianos.

“(Se) prohibe la proclamación del cristianismo. Así que los misioneros no son aceptados en China para trabajo evangelístico”, comentó Marcial, según comprueba su experiencia en el país asiático.

Mientras, el reverendo Esteban González Doble, pastor general de la Iglesia Discípulos de Cristo de Puerto Rico, indicó que ha conocido jóvenes que “han participado en (Jucum) y le ha sido muy edificante”.

Expuso, sin embargo, que “en lo que yo no estaría de acuerdo es en que los jóvenes vayan a esta experiencia abandonando su responsabilidad primaria que es su proyecto vocacional y educativo”.

Al respecto, la venezolana Andrea Blanchard, directora de la Escuela de Discipulado, aseguró a PRIMERA HORA que la organización viabiliza que los participantes asistan dos días a la semana a su universidad y el resto de los días permanezcan en la sede.

Mientras tanto, el sínodo del Caribe de la Iglesia Luterana, Francisco Sosa; el doctor Sergio Ojeda, presidente del Seminario Evangélico; y el reverendo Héctor Soto, presidente de Concilio de Iglesias, dijeron desconocer sobre Jucum.

Desde los años 80 la base de Jucum en Puerto Rico se encuentra ubicada en Juncos, cerca del pueblo, donde actualmente cuenta con un campo de 10 acres con dormitorios, oficinas, salón de clase, comedor, entre otros recursos.