Aunque una persona tenga historial de uso de sustancias controladas o dé positivo en las pruebas toxicológicas que se le realicen en el hospital, puede ser donante de órganos, explicó hoy Mariam Zadee, representante de LifeLink, entidad que dirige la donación de órganos y tejidos en la isla. 

“No es un criterio de exclusión para la donación de órganos el abuso de sustancias controladas”, sostuvo Zadee en conferencia de prensa en la Oficina del Procurador del Paciente, en Hato Rey, donde presentaban un comité que dirigirá la creación de una legislación en torno a los casos de diagnóstico de muerte cerebral.    

La representante de LifeLink explicó que, luego de que es autorizada la donación, los órganos son sometidos durante cinco horas a pruebas serológicas y toxicológicas, para determinar la presencia de cuerpos extraños o enfermedades en ellos.    

“Luego que el caso ya es de LifeLink, se hacen una serie de pruebas que incluyen todas las formas de hepatitis, HIV y otros tipos de virus, es parte de lo que se hace en la evaluación, antes de la recuperación del órgano”, añadió Zadee.    

Además de las pruebas, se hace un historial médico y social, y todo es presentado ante el cirujano de trasplante y el paciente para evaluar si utilizarán o no el órgano.    

“Toda esta información, tanto los estudios serológicos como el historial médico y social, es presentado al centro de trasplante, y al fin y al cabo es el cirujano de trasplante quien decide si va a aceptar ese órgano porque depende de los pacientes que tengan en la lista en ese momento”, indicó la representante de LifeLink.    

“Si hay unas personas que están esperando un corazón y solamente le quedan horas de vida, va a aceptar quizá un donante clasificado como alto riesgo y hay muchos otros criterios”, expresó Zadee.    

Pero el Procurador de la Salud, Carlos Mellado, comentó que “el problema es que si tienes historial de uso de drogas, principalmente intravenosas, a lo mejor al momento en que se te hace la prueba de HIV podría dar negativa, pero al pasar el tiempo, dado a que no es una prueba que se pueda detectar inmediatamente, ese órgano podría desarrollar la enfermedad”.    

Por tal razón, es el receptor del órgano quien tendrá la última palabra en torno a la donación.    

En la actualidad, cada año aproximadamente 100 personas son donantes de órganos y 220, de tejidos, a pesar de que llegan más de 1,500 admisiones anualmente a los centros de traumas.