Cada vez son más los usuarios de telefonía móvil, a nivel mundial, que buscan hacer más con su teléfono celular.

Los puertorriqueños no son la excepción y tendrán disponible, a partir del 17 de octubre, la opción de adquirir el iPhone 3G, un teléfono que reúne muchas de las aplicaciones comunes ya en la vida diaria de muchos profesionales.

AT&T tiene a su cargo el lanzamiento del celular para Puerto Rico y promete, según el vicepresidente y gerente general de operaciones inalámbricas de la compañía, José Juan Dávila, “ser un fenómeno”.

“Al consumidor puertorriqueño le gusta la tecnología. Es un producto robusto en Estados Unidos y la gente lo estaba esperando”, aseguró Dávila.

Según el vicepresidente, al teléfono no le falta nada porque es como “una laptop en tus manos, que puedes llevar a cualquier parte y utilizarla”.

La pantalla, tipo touchscreen, permite que se escoja cuál de las múltiples aplicaciones se quiere poner en función.

Al toque, no de un botón sino de un símbolo -lo que lo hace más fácil- se puede activar el GPS (con servicios móviles expandidos para localización), el iPod, la cámara, la Internet, comprar música en iTunes o hasta poner en función una maraca.

Al ser todo icónico (un distintivo de Apple) el teléfono, que a simple vista puede parecer complicado, se simplifica.

La resistencia que los consumidores podrían mostrar por la falta de botones se disipa, según Dávila, con los símbolos que permiten identificar fácilmente la aplicación que se quiere usar.

El teléfono tiene, además, un sensor de proximidad para que, cuando se acerque al rostro, se cancele el touchscreen.

Aunque lleva más de un año en el mercado norteamericano, el iPhone no había llegado a Puerto Rico por razones estratégicas de Apple en términos de agenda.

“A julio de este año, sólo 22 países lo tenían”, afirmó el gerente general de AT&T en Puerto Rico, quien aseguró que todas sus reuniones de negocios siempre terminaban con la pregunta de cuándo llegaría a la Isla.

Además del costo del teléfono, el uso de las aplicaciones que lo convierte en una computadora también tiene un precio. Pero, aun así, Dávila reiteró que el pago es menor que comprar una computadora.

“Cuando tú compras una laptop en $700, $800 o $1,000 la tienes que conectar a Internet, tienes que comprar el servicio”, analizó.

“Ahora, las áreas rurales donde tú estés tienen acceso a Internet de calidad como tú lo ves en la oficina”, detalló Dávila.

El teléfono, cuya venta auguran será un éxito, es el más completo de todos los que se han vendido.

“La data se ha hecho parte integral de los usuarios. El crecimiento lo estamos viendo en estas aplicaciones”, declaró.

El iPhone 3G, que viene en varias tonalidades, estará disponible por $199 el modelo 8GB y $299 el 16GB, sujeto a contratos de dos años.

La expectativa de ventas de la compañía supera al modelo de teléfono Razr, uno de los más vendidos en el país.