El Día de Reyes fue el lunes pasado, pero los Magos de Oriente no han dejado de trabajar.

Hoy, domingo, estos tres personajes llegaron hasta Villas del Sol en Toa Baja para llevar juguetes y alegría a los más de 100 niños que residen en esa comunidad.

"Este es un momento muy especial para nuestra iglesia, porque hemos llevado alegría y paz a los cientos de residentes de Villas del Sol, muy en especial a los niños”, expresó el obispo Juan Vera sobre la visita simbólica de los Reyes Magos, organizada por la Iglesia Metodista.

Los tres sabios fueron personificados por los líderes obreros Manuel Perfecto y Federico Torres Montalvo, y el presidente del Colegio de Médicos Cirujanos de Puerto Rico, el doctor Eduardo Ibarra.

 “Ellos se ofrecieron para caracterizar y humanizar a los Reyes Magos que llegaron con sus regalos a esta comunidad en el día de hoy, dejando claro que ante Dios todos somos iguales", destacó Vera.

Ibarra, al igual que los líderes sindicales, se expresó contento con la oportunidad de encarnar a estos personajes, sobre todo en Villas del Sol, comunidad con la que tiene un vínculo cercano.

"Para nosotros, esta actividad tiene un significado muy especial porque Jeanny (Ibarra) y este servidor ayudamos con la donación de los terrenos para albergar las residencias de estos hermanos dominicanos. El estar aquí caracterizando a un rey mago no es otra cosa que mantener una conexión divina con nuestros hermanos y brindar un momento de alegría a estos niños que son parte de la vida misma de Puerto Rico", señaló.

Perfecto, líder de la Unión General de Trabajadores (UGT), indicó que su participación estuvo motivada por esta tradición, unas de las más presentes en el puertorriqueño.

 "Esta es la verdadera tradición de regalos para nuestros niños, la cual no podemos perder nunca. Puerto Rico tiene claro que nuestra Navidad tiene como plataforma el nacimiento del niñito Jesús y la visita de los Tres Reyes Magos", mencionó.

Por su parte, Montalvo, presidente de la Central Puertorriqueña de Trabajadores, dijo que “nosotros somos del pensamiento que hay que luchar día a día para mantener nuestra tradición de pueblo de habla hispana”.

En ese sentido, resaltó que la tradición de los Reyes es una que los boricuas deben proteger y preservar.

Villas del Sol fue afectada por una decisión del gobierno federal, que terminó en una orden de desalojo que puso en efecto la administración del exgobernador Luis Fortuño y que tocó a cerca de 210 familias. Posteriormente, el doctor Ibarra Ortega y su esposa anunciaron la donación de unas 80 cuerdas de terreno en Arecibo para reubicar a los residentes. Sin embargo, el gobierno declaró las tierras no desarrollables y les ofreció en permuta otros terrenos en Toa Baja.

"Esperamos que el gobierno actual ayude en el proceso de permisología para así poder iniciar la construcción de las residencias de estos hermanos. No debería dilatarse el proceso, ya que el sufrimiento de ellos ha sido uno que los ha dejado marcados para toda la vida", concluyó Ibarra.