Majestuoso vuelo de la mariposa quebradillana por los acantilados
La Liga Ecológica de Quebradillas ha adoptado la preservación y protección de la mariposa Puerto Rican Harlequin como parte de sus proyectos, indicó su presidente, Ernesto Estremera de Jesús.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 13 años.
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Sus colores anaranjado, blanco y color ladrillo llenan de admiración a los caminantes del área recreativa de Guajataca, en Quebradillas, cuando la observan revolotear por el aire de esa hermosa zona de acantilados.
La Atlantea tulita o Puerto Rican Harlequin, como se le conoce entre los estudiosos, es simplemente la mariposa quebradillana para los residentes de este municipio, que se enorgullecen de tener una población de esta especie que está en peligro de extinción.
La Liga Ecológica de Quebradillas ha adoptado la preservación y protección de esta mariposa como parte de sus proyectos, indicó su presidente, Ernesto Estremera de Jesús.
Este grupo se formó en la década de los 80, aunque se inscribió como corporación sin fines de lucro en 2009. La fundación de la organización estuvo liderada por el botánico Miguel A. Vives.
“La Liga se dedica a ayudar a proteger y conservar los ecosistemas naturales de Quebradillas y el noroeste de Puerto Rico”, explicó Estremera. “En Quebradillas hay muchas especies en peligro de extinción y endémicas y decidimos protegerlas y darlas a conocer”, agregó.
Estremera, y el vicepresidente de la Liga, Willie Hernández, se mantienen en el estudio y divulgación de la flora y la fauna quebradillanas.
En el área del merendero en el Centro Recreativo Pedro Albizu Campos, donde habita la mariposa quebradillana, existen unas 158 especies de plantas, entre ellas es abundante la Oplonia spinosa, en la que se lleva a cabo el ciclo de vida de la Atlantea tulita.
“En esta área se encuentra la población más grande de esta mariposa en Puerto Rico”, dijo Estremera.
Es por eso que la Liga Ecológica instituyó un festival, que este año se realizó por segunda vez, para que la gente conozca sobre esta mariposa y trate de avistarla en la zona.
“Lo que más nos preocupa es el desarrollo que se lleva en el área”, dijo el vicepresidente de este grupo, quien sostuvo que los desarrollos residenciales de la zona “han compactado el área” de reproducción de este insecto.
“Esta mariposa está en peligro de extinción; por eso nos preocupa que no se haya declarado todavía un área protegida”, explicó Estremera, quien dijo que toda esa área de acantilados está amenazada. “Se han destruido poblaciones por la fragmentación del bosque”, agregó.
El presidente de la Liga comentó que en Quebradillas se han visto otras poblaciones de la Atlantea tulita en el área de Puerto Hermina y en Puente Blanco. Sin embargo, la más grande se encuentra en el área de los merenderos de Guajataca.
Estremera lamentó que, aunque el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales ya la declaró especie en peligro de extinción, aún no se han establecido áreas críticas para la especie en esta zona para impedir que se destruya su hábitat.
La mariposa quebradillana, descubierta en 1877, se distingue por su característico vuelo que parece más como si planeara, dijo Hernández. También la distingue su ojo grisáceo.