Unos 297,526 de los niños y jóvenes de Puerto Rico, lo que representa el 55% de la población de menores de edad, viven bajo niveles de pobreza, según concluyó un estudio realizado por el Instituto del Desarrollo de la Juventud.

En general, representa que hubo un 2% de reducción de la población entre 0 a 17 años que vive bajo niveles de pobreza cuando se comparan los resultados del 2019 con los del año 2021. Es que el estudio reveló que ayudas como el desempleo otorgado durante la pandemia del COVID-19 y el Child Tax Credit (CTC, en inglés) provocó una “leve” mejoría, indicó la gerente de estadísticas de esta organización, Caridad Arroyo.

Los hallazgos del Índice de Bienestar de la Niñez y la Juventud se dieron a conocer este miércoles durante una mesa redonda realizada en la sede del Instituto en Santurce.

Sobre la reducción de la población de jóvenes y niños bajo nivel de pobreza, Arroyo detalló que “no es significativo”.

Explicó que se debe analizar lo ocurrido en el 2022 y años subsiguientes, donde ya han desaparecido o disminuido muchas de las ayudas del COVID-19, para “determinar patrones” e identificar si se encamina una merma real.

Lo que sí vislumbró el estudio fue que esta reducción de 2% del nivel de pobreza llevó a que los niños tuviesen una mejor nutrición o las condiciones de su hogar, en términos estructurales o de equipo, mejoraran.

“Todo lo que vimos cuando hicimos el análisis del impacto del CTC en la familia, uno de los principales beneficios fue que las familias reportaron que, sí, hubo una mejor nutrición en el hogar. Algunas familias se insertaron a estudiar... La gran mayoría habló de paz mental. De, al tener un dinero, tuvieron mayor paz para poder sufragar unas necesidades vigentes que tenían dentro del hogar”, detalló Arroyo.

Carencia marcada

En general, este Índice de Bienestar de la Niñez y la Juventud alude a que la mediana de ingresos de las familias con menores de edad en la Isla es de $22,734 al año. Esta cifra representó un aumento, en comparación con el 2019, donde se ubicó $19,392 mensuales.

En la actualidad, es Naranjito el pueblo donde las personas tienen menor ingreso, con un promedio de $11,396 anuales.

El umbral de pobreza general establece que una familia de cuatro personas, dos de estos menores de edad, viven bajo nivel de pobreza si su ingreso ronda en $27,479 anuales.

Por otro lado, el estudio apunta a que la mayor tasa de niños y jóvenes bajo nivel de pobreza viven en los municipios Vieques, Lajas, Maricao, Adjuntas y Florida.

Arroyo precisó que entre los hallazgos más relevantes están que uno de cada dos niños de bajos y medianos ingresos no está matriculado en programas preescolares, mientras cada vez hay más padres y madres que se encuentran en el ambiente laboral.

Además, mencionó que “el 82% (de los niños y jóvenes) viven en zonas de alta pobreza”.

Como “buena dimensión”, la analista de investigación Vallerie Blakely Valle, expuso que se ha reducido el número de madres de entre 15 a 50 años que tienen hijos sin tener un diploma de cuarto año, de 18% en el 2019 a 8% en el 2021.

Además, destacó que “Puerto Rico logró reducir significativamente la tasa de nacimiento en adolescentes de 15 a 19 años”. La reducción fue de 52 de cada 1,000 en el 2011 a 13 de cada 1,000 en el 2021.

La investigadora comentó que en el 2021 unas 1,267 adolescentes y jóvenes de entre 15 a 19 años tuvieron un infante.

Ante este escenario, la doctora María Enchautegui, directora de investigación del Instituto, lanzó una “llamado a la acción”.

Dijo que la información incluida en el estudio ayuda a establecer política pública o a realizar medidas legislativas que redunden en un mejor bienestar de los menores de edad en la Isla,

“Puerto Rico continúa estancado en las condiciones de vida en las que se desarrolla la niñez y la juventud, con una clasificación de D. Con esta clasificación en el Índice de Bienestar de la Niñez y la Juventud, Puerto Rico se ubica en la posición número 31 en comparación con las 51 jurisdicciones de Estados Unidos evaluadas en el Índice. Los datos económicos nos dicen que hay trabajo por hacer. La única manera de mejorar estos indicadores es con acciones intencionales y articuladas. Desde el Instituto proponemos y apoyamos cambios sistémicos que generan oportunidades para los niños y niñas que viven en familias de ingresos bajos y que abren camino para la movilidad económica”, resumió.

Cabe destacar que trascendió en el estudio que Puerto Rico continúa en peor condición económica que el resto de los estados de Estados Unidos.

Por ejemplo, Nuevo México tuvo como nota una F, pero su mediana de ingreso fue $36,000 anuales más que la de Puerto Rico o lo que representa alrededor de $58,000 anuales. La mediana de ingreso en la Isla fue de $22,734 anuales.

Sin embargo, Puerto Rico obtuvo una D en términos generales. No se ubicó como entre las peores jurisdicciones, como estuvieron Nuevo México, Louisiana y Alabama, ya que los menores y jóvenes boricuas tienen mejor acceso a servicios de salud y de educación, es menor la violencia juvenil, así como se ha reducido el nacimiento de infantes de madres adolescentes, entre otras cosas.