El grupo “Mujeres contra LUMA” realizó este sábado una manifestación dentro del centro comercial Plaza las Américas para “crear conciencia” sobre el contrato de privatización del sistema de trasmisión y distribución del sistema eléctrico de Puerto Rico, así como para exigir su anulación total.

El objetivo fue —según comunicaron las organizadoras de la actividad en un comunicado de prensa— “difundir la verdad sobre los problemas que continúa ocasionando la empresa privada, además de develar la falsedad de muchos de los planteamientos que han estado comunicando las últimas semanas los ejecutivos y representantes de la empresa”.

Las militantes contra la empresa privatizadora LUMA se concentraron en el área de la Terraza del conocido centro comercial. Al son de consignas, desplegaron una pancarta gigantesca que leía: “Con Luma no habrá paz”.

Al mismo tiempo, repartieron una hoja informativa con varios puntos que especifican las “implicaciones negativas” del contrato, entre ello, que LUMA “ya ha demostrado representar riesgos reales a nuestra salud y seguridad”.

“Ya múltiples sectores se han expresado sobre las vicisitudes que representa que un servicio esencial como la energía eléctrica haya pasado a manos de una empresa de dudosa reputación y que no conoce sobre este tipo de funcionamiento. No debemos esperar a que ocurra una desgracia mayor para exigir su anulación”, expresó Lydimar Garriga Vidal, portavoz del colectivo.

Por su parte, la estudiante y maestra Karla Sanabria-Véaz opinó que el contrato de LUMA es parte de un “plan muy concertado” de gentrificación y de transformar al País en un paraíso fiscal para extranjeros millonarios.

“Edwin Miranda lo dijo claro en el chat: ‘Veo el futuro y es hermoso, un PR sin Puertorriqueños’. Mientras a los extranjeros de LUMA le entregaron sobre 700 millones para operar el primero de junio, nuestra juventud se queda sin futuro en un país que le cierran sus escuelas, los deja sin Universidad pública y sin aumento al salario mínimo. Es importante que luchemos como país para sacar a la Junta y LUMA. Que sepan ellos que si no nos dejan soñar, nosotras no les dejaremos dormir”, dijo.

Las portavoces del grupo enfatizaron que el contrato de LUMA Energy “es una de las muchas instancias donde la corrupción y la falta de una política pública que atienda las necesidades del pueblo se imponen para abrirle paso a que compañías inescrupulosas se enriquezcan mientras colocan en detrimento nuestros recursos y los servicios esenciales”.

Enfatizaron que como mujeres, trabajadoras, estudiantes, madres, entre otras, conocen lo que implica asumir múltiples jornadas y empleos precarizados mientras vivir se convierte en una batalla campal.

“Nosotras continuaremos exigiendo la anulación del contrato porque precariza aún más nuestras condiciones de vida al colocar un servicio esencial a la merced de negocios leoninos”, finalizó Garriga Vidal.