Unos 14 peritos electricistas juntaron sus respectivas empresas con el objetivo de ser considerados por la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) en la reconstrucción del sistema eléctrico de Puerto Rico.

Así que transformaron el modelo corporativo en un movimiento cooperativista, ya que por sí solos se les hacía cuesta arriba competir por estos proyectos, pues el Gobierno solo dio paso a grandes compañías estadounidenses que se llevaron un dineral.

Tras más de un año y medio de intentos, al fin consiguieron el aval de importantes sectores y de esa manera constituir la Cooperativa de Profesionales de la Industria Eléctrica de Puerto Rico y el Caribe, bautizada como Electricoop.

El movimiento es integrado por electricistas de toda la Isla quienes vieron la oportunidad de aportar sus respectivos conocimientos en el mismo suelo que los vio nacer, brindando esperanza a las familias que residen en lugares de difícil acceso.

“Actualmente la Autoridad (de Energía Eléctrica) está sufriendo unos cambios con la reestructuración y lo que queremos es insertarnos como cooperativa a hacer trabajos de reestructuración del sistema eléctrico en nuestro país. Nosotros somos los autorizados en ley para trabajar en el sistema eléctrico en Puerto Rico, porque para trabajar en el sistema eléctrico en cualquier área, tienes que ser perito electricista licenciado y colegiado o ingeniero eléctrico licenciado y colegiado”, explicó Fundador Rosario Cortés, presidente de la Junta de Directores de Electricoop.

“A principio no sabíamos que podíamos hacer una asociación o una corporación de peritos hasta que en algún momento llegamos a la Liga de Cooperativas (de Puerto Rico), que fue realmente donde nos encaminaron hacia el movimiento cooperativista. Ahí pudimos adoptar el modelo que teníamos de una compañía y amoldarlo al movimiento cooperativo”, agregó Rosario Cortés, que es natural de Peñuelas.

Además de restablecer el sistema eléctrico, esta cooperativa de trabajadores también quiere ofrecer sus servicios a empresas de telefonía. 

“Nosotros hicimos la asamblea constitutiva el 18 de diciembre de 2018, pero ya llevábamos casi un año en esto y no fue hasta hace dos semanas que nos dieron el permiso ya final de COSSEC (Corporación Pública para Supervisión y Seguro de Cooperativas de Puerto Rico), agencia que regula las cooperativas en Puerto Rico, desde hacer el reglamento porque esto es algo nuevo”, destacó.

“Somos peritos electricistas que trabajamos de forma independiente cada uno y entonces cuando vimos la totalidad de requisitos que piden estas agencias, porque no tan solo queremos hacerle labores a la AEE, también las compañías de comunicaciones como Claro, AT&T y eso, pues esta gente pide una serie de requisitos que una compañía pequeña como nosotros se nos hacía prácticamente imposible y decidimos unirnos como cooperativa”, afirmó.

Con la cooperativa no tan solo se resalta el talento puertorriqueño, sino que también ponen a disposición sus respectivos equipos en vías de fortalecer su oferta de servicios.

“Nosotros podemos hacer cualquier tipo de labor, mayormente estamos preparados en voltajes de subtransmisión de 38 mil voltios hacia abajo; de ahí llegan los voltajes de distribución que son mayormente 13 mil, 7 mil, 4,200 voltios, hasta los voltajes domésticos que tenemos en nuestros hogares, para todo, tanto en labores de desganche, luminarias, reparaciones, instalaciones de postes”, sostuvo el electricista sureño.

“Ahora mismo entre todos los socios tenemos 52 camiones canasto, 47 grúas y ciento y pico de guaguas. Puerto Rico cuenta con unos 6,000 peritos electricistas y se estima que el 40% trabaja por cuenta propia igual que nosotros; los demás trabajan para alguna industria u otras compañías”, reveló el perito peñolano al agregar que algunos de sus socios son de Ponce, Villalba, San Lorenzo, Camuy, Carolina, entre otros.

De otra parte, Rosario Cortés mencionó que una de las ventajas de esta cooperativa es que el dinero generado por sus trabajos se quedará en el País, aportando también a la recuperación económica. 

“Lo que buscamos en el movimiento cooperativista es que todo lo que se genere se quede en Puerto Rico porque estas compañías gastan su capital, sus ingresos, lo que se llevan de aquí lo gastan afuera. Lo que queremos con el modelo cooperativista es ayudar al ferretero haciendo las compras locales, para de esa forma poder robustecer un poquito más la economía, crear empleos”, expuso.

“Una de las ventajas que tiene la cooperativa es que todos los socios son de aquí, conocen bien la topografía de nuestro País, conocen cada rincón, cada corte de línea, cada subestación, que es algo que cuando llegan estas compañías de afuera tienen que ir adaptándose y eso es algo que ya nosotros conocemos porque trabajamos en esto prácticamente todos los días”, manifestó.

Rosario reveló la desigualdad salarial que enfrentan los peritos electricistas locales a quienes se les paga cerca de $12 por hora, mientras que trabajadores importados reciben más del doble.

“Estas compañías que llegan se llevan los millones, muchas veces contratan personal de aquí, otros traen personal que no está cualificado para trabajar en el sistema eléctrico del País y el Colegio de Electricistas ha estado trabajando con eso, para asegurarse de que ellos también cumplan con la ley”, dijo Rosario Cortés.

“Sé que ellos tienen unos gastos operacionales pero lo que pagan al local es una migaja, porque cuando traen gente de afuera le pagan salarios de sobre $30 la hora, mientras aquí cuando quieren contratar un perito o un ayudante no llega ni a los $12 o $15, como mucho y una vez aprenden los sacan”, denunció por su parte el villalbeño José Ángel Flores Rodríguez.

En tanto, Saúl Torres Rivera insistió que la finalidad de Electricoop es robustecer el sistema eléctrico en los sectores más remotos de la Isla.

“Parece mentira que a veces pensamos en grandes proyectos como estadios y parques, pero todavía en nuestros campos viven familias sin los servicios esenciales de agua y luz, que tal vez tienen un acueducto o manantial que no es el más apropiado, que lo que tiene es un arrimo de luz de un vecino que le pasa un cable, poniendo en peligro la vida y la propiedad”, advirtió el ponceño Torres Rivera.

“Una vez entremos en esto, parte de los ingresos que tenga la cooperativa es poder trabajar esa obra social y llevar un servicio esencial a la gente en conjunto con los municipios y la Autoridad de Energía Eléctrica”, reveló Torres Rivera quien con su compañía devolvió el servicio eléctrico a sus vecinos del sector Tamarindo durante la emergencia desatada por el paso del huracán “y de hecho, pedíamos permiso a la Autoridad para hacerlo y nos decían que era bajo nuestro propio riesgo, pero lo hicimos”.

Los peritos cooperativistas están deseosos de iniciar su aportación en la reestructuración del sistema eléctrico, pero la burocracia gubernamental no ayuda mucho en ese intento.

“Tuvimos una reunión con el subdirector (de la AEE) Jaime López el 11 de abril, le presentamos la cooperativa y le gustó la idea, quedamos entonces de que nos iba a ofrecer unos adiestramientos de seguridad que se les dan a todas las compañías que hacen contratos con la Autoridad, pero al día de hoy hemos tenido varias comunicaciones y no hemos tenido respuesta. Buscan afuera, pero a nosotros nos restringen”, lamentó.

“Esta semana estaremos entregando toda la documentación requerida por la AEE y entrar así como licitador. Ya estamos trabajando en la parte de Hacienda para las exenciones contributivas correspondientes, esa es una ventaja que tendrían nuestros clientes, que nosotros por tener exenciones”, explicó al destacar que cuentan con el respaldo de la Liga de Cooperativas de Puerto Rico, Colegio de Peritos Electricistas de Puerto Rico y la National Rural Electric Cooperative Association (NRECA), entre otros.