No deje que sus hijos vivan del cuento
¿A quién no le parece gracioso y hasta simpático ver a su pequeño con una toalla amarrada al cuello imitando a “Superman”?

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 12 años.
PUBLICIDAD
¿A quién no le parece gracioso y hasta simpático ver a su pequeño con una toalla amarrada al cuello imitando a “Superman”?
Creo que a prácticamente todo padre que ha tenido una escena similar ante sí se le ha dibujado una sonrisa en el rostro al ver a su pequeño en dicho papel.
Sin embargo, el no hablarle a su hijo a tiempo de los superhéroes y cómo estos son creados en un mundo de ficción podría tener serias consecuencias.
Ese fue el caso de un niño de siete años que resultó ayer con una fractura en uno de sus brazos luego que se lanzara desde un televisor que estaba ubicado en la sala del hogar en Río Grande.
El niño quería caer encima de un colchón, pero cayó en el suelo, por lo que tuvo que ser transportado al Centro de Diagnóstico y Tratamiento de Canóvanas, donde fue diagnosticado con fractura en el radio y la mano derecha, por lo que tuvo que ser intervenido quirúrgicamente.
Para la psicóloga clínica Amarilis Muñoz, se trató de un lamentable accidente. “Creo que pocas cosas nos pasan cuando somos niños”, sostuvo quien también es catedrática de la UPR.
Aunque destacó sobre la importancia de hablarle al menor sobre los superhéroes, sus supuestos poderes y lo que se debe o no imitar, es aún más meritorio supervisarlos e ir insertándolos poco a poco al mundo tal cual es. “Hay que ir insertándolos a la realidad en un ambiente agradable para ellos y hacer esa distinción desde temprana edad”, dijo.
Sostuvo que un niño entre los siete y ocho años puede hacer esa diferenciación. Los más pequeñines quizás no tengan la madurez para hacerlo, pero aprenden a distanciarse de las situaciones peligrosas si uno le habla.
Llevarlos hacia ese estado en que pueden diferenciar entre la realidad y la fantasía debe hacerse con palabras sencillas y cuidando de que la historia no pierda el encanto, opinó, por su parte, el psicólogo Carlos Sosa.
Coincidieron en que sería un buen momento para aprovechar el momento y hablarle al menor sobre héroes y heroínas de la vida real, como podría ser una figura ilustre o un amigo que ha logrado metas dignas de admiración. “A los niños les encantan esas historias”, sostuvo Rosa.
En fin, hable con sus hijos sobre realidad y ficción porque los podrían sorprender... de mala forma.
No todo es malo... ¡pero cuidado!
• Habla con ellos
Siéntate con tu niño y explícale que hay mucha diferencia entre las caricaturas y la vida real. Aprovecha para hablarle de héroes y heroínas reales, como Martin Luther King, y cómo estos también fueron valientes.
• Destaca lo bueno
Si tu niño se inclina por los actos de violencia de los superhéroes, hazle ver que son algo más que gente violenta. Por ejemplo, a “Spider-Man” le gusta leer y estudiar.
• Está pendiente
Explícale sobre la diferencia entre el cine, la televisión y la vida real. Cuando vea a los actores que pretenden saltar de las ventanas, por ejemplo, dile por qué no debe imitar estas acciones en casa.
• Establece horarios
Implanta reglas sobre cuándo y dónde se les permite a los niños jugar a los superhéroes. Se puede limitar este juego solamente a exteriores. Además, podrás tener un control más preciso sobre el menor.
• No se lo impidas
Jugar al superhéroe de una manera positiva permite que los niños enfrenten sus temores. Los hace sentir poderosos y en control de la situación. Además, promueve la creatividad y estimula sus habilidades.
• Construye intereses
Mirar las películas de Star Wars puede ser una manera de aprendizaje sobre la navegación espacial. Un libro de “Spider-Man” pudiera llevarlos a explorar el mundo de los insectos.