Unos 2,000 límbers diarios, de más de 25 sabores, son preparados artesanalmente bajo la marca “Los Límber de Mai”, impulsada por el joven empresario de Cataño Yadriel Huertas con la inspiración de su madre, Julia Colón, quien fue la creadora de las exquisitas recetas que hoy mercadean.

El producto, que se vende en más de 100 establecimientos, como supermercados, gasolineras, farmacias y escuelas, en 27 pueblos de la Isla, nació del talento de Julia, quien desde la terraza de su hogar en el barrio Puente Blanco, en Cataño, vendía a sus vecinos y conocidos este delicioso y refrescante postre.

Entonces Yadriel fue el visionario que decidió sacar el producto de su barrio para dar paso a una exitosa empresa familiar.

“En el 2015, mi mamá vendía los límbers desde la terraza en un segundo nivel; no se vendía mucho, solamente entre los vecinitos, pero aun así me tumbó mi negocio de los mantecados con sus límbers. Entonces, como yo trabajaba en una compañía de mantenimiento le dije un viernes: ‘dame 20 límbers que los voy a regalar’. Ese viernes, desde que regalé esos límbers, no podía llegar al trabajo sin límber”, contó el joven de 29 años.

Entonces, la aventura comercial comenzó y Yadriel puso en práctica lo estudiado en el Programa de Mercadeo de Escuelas Públicas, en la Escuela Francisco Oller, de Cataño.

“Dije: ‘contra mano, la aceptación ha sido brutal’; y como alrededor de mi trabajo había muchas compañías más y almacenes, pensé en el calentón de los almacenes y en el frío de los límbers y que sería buena la idea de llevarlos. Efectivamente, cuando iba con mi mamá, en 40 minutos podía vender entre $80 y $90, a 50 chavos cada límber”, recordó el joven empresario.

Los postres están disponibles en más de 25 sabores; desde clásicos hasta otros originales.
Los postres están disponibles en más de 25 sabores; desde clásicos hasta otros originales. (Isabel Ferre Sadurni Photography)

No pasó mucho tiempo cuando un inesperado evento de salud le arrebató la vida a su mamá.

“Mi mamá me dijo ‘renuncia’, porque me habían cambiado el horario para entrar a las 4:00 de la mañana, y yo renuncié. Pero, a la tercera semana ella fallece inesperadamente. Yo estaba conduciendo y eran las 10:00 de la noche y a ella le dio un ataque (cardiaco) y falleció al lado mío ese domingo, 23 de octubre de 2016″, lamentó Yadriel. Además de afrontar ese duro suceso, el joven se armó de valor para echar hacia adelante el negocio al que le estaba dando forma junto a su progenitora. Fue entonces que su hermana, Arelis Huertas, se unió al proyecto para continuar el legado de su madre. “Mi hermana se ofreció a ayudarme, sin que le pagara, porque realmente ella era la que tenía el conocimiento; ella siguió con la receta como tal, así fue como seguimos hacia adelante en medio de la ausencia de mi mamá. Luego, ella terminó renunciando a un trabajo de 15 años por hacer límbers. Estuvo conmigo tres años”, recordó.

“Mi hermano Julio González también estuvo conmigo repartiendo los límbers. Ya ambos se fueron, porque tienen sus trabajos, pero mi hermana le dio el ‘training’ a toda esta gente aquí (empleadas) y ahora está mi esposa (Lynette Falcón) a cargo y sigue siendo un negocio familiar, porque trabajan las hermanas de mi cuñada”, agregó el empresario.

El foco ha sido llegar a la mayor cantidad de establecimientos posibles. Hoy día cuentan con más de 25 sabores: acerola, cherry, cherry-limón, coco, coco-piña, crema, Ferrero-Nutella, frutas, guanábana, guayaba, limón, leche, maní, Nutella, Nutella-cheesecake, oreo, parcha, piña, piña colada, pistachio, queso, queso-guayaba, queso-pistachio, Sara Lee, strawberry cheesecake, tamarindo, uva y zanahoria-cheesecake.

El lugar emplea a ocho personas.

“Estamos con las neveras de ‘Los Límber de Mai’ en supermercados, estaciones de gasolina, farmacias y escuelas, donde tenemos un programa para recaudación de fondos, que es bien importante para nosotros, además de programas de mercadeo en escuelas públicas. Nuestro fuerte es el distribuir límbers en Puerto Rico y queremos que nuestra marca sea reconocida”, sostuvo Yadriel.

Destacó, además, que una de las mayores satisfacciones del trabajo es complacer el paladar de sus clientes y, de esta forma, rendir tributo al esfuerzo de su madre con un producto de calidad.

“Si me hubieran preguntado en el 2012, cuando me gradué de cuarto año, si yo me iba a dedicar a vender límber, hubiera dicho que estoy loco. Yo tenía tantas aspiraciones, que si administración de empresas, que gracias a Dios mi realidad tiene que ver; que si montar mi propio negocio, y aquí estoy. No estoy lejos de la realidad”, reflexionó el empresario.

“Estamos en expansión, en crecimiento. Tuve que utilizar todo el espacio de la tienda para la producción y vendo en la puerta para llevar. Las chicas hacen 2,000 límbers diarios para que se vayan el mismo día, además de bregar con las más de 100 neveras que tenemos alrededor de toda la Isla. También sacamos dos días para hacer ‘delivery’ en área metro para venta de nuestros límbers al detal. De verdad que tenemos las manos bien llenas”, concluyó satisfecho el joven.

Quienes deseen conocer más acerca de “Los Límber de Mai” y probar estos suculentos vasitos llenos de sabor, pueden acceder a su página de Facebook e Instagram: Los Limber de Mai, llamar al 787-313-1155 para ordenar o visitarles en su local ubicado en el #106 en la Avenida Barbosa, en Cataño.