El Tribunal Supremo ratificó su determinación de anular la certificación de la Declaración de Impacto Ambiental final (DIA-F) que le aprobó la Junta de Calidad Ambiental (JCA) a los proponentes del proyecto turístico Dos Mares Marriott Resort.

El máximo foro judicial devolvió el caso a la JCA para que inicie nuevamente el trámite acorde con lo dispuesto en una sentencia que había emitido en mayo.

Con esa decisión, el Supremo declaró no ha lugar una segunda solicitud de reconsideración presentada por los proponentes del proyecto.

"A la tercera moción de reconsideración presentada por la parte recurrida, se declara no ha lugar", señala el máximo foro en una decisión del 3 de julio, divulgada hoy.

"Se devuelve el caso a la Junta de Calidad Ambiental para ulteriores trámites acordes con lo aquí dispuesto", reza la determinación de 17 páginas.

En su sentencia del 25 de mayo, el Tribunal Supremo indicó que la JCA había omitido procedimientos necesarios para aprobar la DIA-F, y catalogó entonces como "preocupantes" las deficiencias, carencias y omisiones de ese documento.

"La JCA, al aprobar la declaración de impacto ambiental final para el proyecto impugnado, obvió serios señalamientos de carácter ambiental que requerían medidas correctivas de parte de los proponentes del proyecto conforme las exigencias legales y reglamentarias aplicables", indica.

"El efecto acumulativo de las deficiencias, carencias u omisiones de la DIA-F es altamente preocupante, por lo que no podemos avalar las determinaciones de los entes administrativos que han intervenido en este proceso", agrega el documento.

Esta decisión se hace pública en momentos en que el alcalde novoprogresista de Fajardo, Aníbal Meléndez, respaldó el polémico proyecto.

El proyecto Dos Mares propone la construcción de un amplio complejo residencial y turístico en un predio de 354.8 cuerdas de terreno compuestas por tres fincas, dos de las cuales pertenecen al gobierno de Puerto Rico.

La propuesta original incluía la construcción de 250 unidades residenciales, un hotel de 350 habitaciones, un campo de golf de 145.59 cuerdas, un centro de información ecológica y una laguna para reciclar las aguas provenientes de la planta de tratamiento.