El Tribunal Supremo de Estados Unidos denegó hoy una solicitud del gobierno de Puerto Rico para que el Negociado Federal de Investigaciones (FBI, en inglés) le entregue información relacionada con la muerte del dirigente independentista puertorriqueño Filiberto Ojeda Ríos, muerto de un tiro efectuado por un agente federal en Hormigueros, el 23 de septiembre de 2005.

Ojeda Ríos, uno de los alegados arquitectos del robo de 7.1 millones de dólares de un depósito de dinero de la compañía Wells Fargo en Hartford, Connecticut, en 1983, estuvo prófugo 15 años hasta que el FBI lo mató durante el operativo para arrestarlo.

Durante su funeral, miles de personas le rindieron tributo en su pueblo natal de Naguabo, al sureste de la isla, y durante todo el recorrido desde San Juan, cientos de ciudadanos salían a la orilla de la carretera para honrar al hombre que muchos consideran un héroe de la independencia nacional.

El secretario de Justicia puertorriqueño, Roberto Sánchez Ramos, adelantó que evaluará —junto al Procurador General y el Fiscal General— todas las alternativas disponibles para adelantar su reclamo, y reiteró que el FBI debe entregar la información solicitada.

"Tanto desde la perspectiva jurídica como la de política pública, el gobierno federal ha debido, y debe, entregar la información solicitada por el ministerio público", insistió Sánchez Ramos en declaraciones escritas.

El gobierno de Puerto Rico demandó al FBI luego que la agencia se negara a entregarle información sobre la muerte de Ojeda Ríos y el ataque con gas pimienta contra periodistas durante un allanamiento a la casa de una militante pro independencia. El FBI alega que el allanamiento estaba relacionado con información encontrada en la residencia de Ojeda Ríos.

Sánchez Ramos indicó que una vez concluya el análisis de las opciones que tienen disponibles, el Departamento de Justicia "informará al país las determinaciones correspondientes en cuanto a ambas investigaciones".

Un juez del tribunal federal en San Juan denegó la petición del gobierno de Puerto Rico indicando que la autoridad del Estado Libre Asociado no incluía al FBI.

Según la corte estadounidense, la decisión del FBI de no entregar el material no era ni caprichosa ni arbitraria.

Una corte de apelaciones federal determinó que ofrecer información sobre el operativo que llevó a la muerte de Ojeda Ríos "revelaría cómo el FBI actúa cuando obra para capturar a un fugitivo que considera peligroso".

El tribunal de apelaciones, además, indicó que revelar el nombre de los agentes que participaron en la muerte de Ojeda Ríos afectaría la habilidad de los agentes para ejecutar operaciones encubiertas y los expondría a hostigamiento.