El alcalde de Ceiba, Samuel Rivera Báez, aseguró que se hace todo lo posible para que, para principio del verano, culmine el extenso trabajo que se realiza hace un año en el puente que pasa sobre la Quebrada Ceiba en la PR-3, el cual impide el acceso principal a la zona urbana y afecta la dinámica de venta de los comerciantes de la zona.

“Entre mayo a junio deben terminar los trabajos. Gracias a Dios el tiempo climático no provocó nada y pues, se continúa en el área. Personalmente, estamos presionando a Fortaleza para que ellos presionen a la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT) y que ellos presionen a los contratistas para que a finales de mayo se terminen, por lo menos, los trabajos preliminares”, puntualizó el alcalde a Primera Hora.

De hecho, el gobernador Pedro Pierluisi aprovechó una conferencia de prensa en la que se anunciaron trabajos de carrerera en la PR-3 en Fajardo y Luquillo para dar una actualización de las labores del puente de Ceiba.

“En Ceiba continúa activo el proyecto de reemplazo del puente en la carretera PR-3. Este proyecto conllevó la demolición del puente existente y la reconstrucción de una nueva estructura para beneficio de todos los conductores, lo que conlleva una inversión de sobre $8.4 millones”, dijo el primer ejecutivo.

El 25 de enero se cumple un año desde que la ACT demolió y comenzó los trabajos de construcción del nuevo puente que ubica en la PR-3, kilómetro 53.4 en Ceiba. Se dijo entonces que las labores se extenderían por 15 meses y conllevarían el cierre del área.

Debido a las labores, los conductores utilizan como desvío la calle Isabel Rosado hacia la calle Tarawa, desde la PR-979 en dirección hacia Fajardo, la PR-53 o la PR-982. Mientras que para llegar a la PR-981 o PR-977 desde la PR-3 podrán desviarse por la urbanización Santa María calle 1, calle 2 y luego hacia la calle 9 para salir en la calle 50.

Trascendió que el puente, construido en 1918 y que midió 10.36 metros de largo, tenía un tráfico diario promedio de 3,600 vehículos.

“Estoy consciente de que estos trabajos se realizan en la entrada principal de mi pueblo y afecta a comerciantes del área y por eso les dimos un incentivo, pero sabemos que no es suficiente”, acotó el alcalde en referencia una ayuda económica de $2,500 que se les proveyó a los pequeños comerciantes del área.

De otra parte, adelantó que una vez se abra el tránsito a los vehículos, se construirá (sin interrumpir totalmente el flujo de carros, una rotonda que “dará la bienvenida al pueblo a las personas que nos visitan”.