Arecibo. El nuevo semestre escolar empezó el martes pasado pero para los padres, estudiantes y personal docente de la escuela Segunda Unidad Sabana Hoyos, las clases no darán inicio hasta que el Departamento de Educación escuche sus reclamos.

Julio Oyola Martínez, presidente del Frente Unido de Padres por la Escuela S.U. Sabana Hoyos, dijo a este medio que la comunidad escolar decidió paralizar indefinidamente las clases para denunciar diversas situaciones que afectan el curso normal del semestre.

El pasado septiembre, amigos de lo ajeno robaron gran parte del cableado de cobre que se utiliza para suplir la energía. Desde entonces, los maestros se han visto forzados a impartir sus clases sin iluminación ni ventilación adecuada en sus salones de clases.

“Aquí entraron unos inescrupulosos a robar y se llevaron el cobre del sistema eléctrico y nos dejaron sin luz”, dijo Oyola Martínez, padre de un niño de cinco años.

“Rápidamente hicimos las gestiones pero la cuestión es que ni OMEP (Oficina para el Mejoramiento de las Escuelas), ni la Autoridad de Edificios Públicos, ni el Departamento de Educación han hecho algo. Hemos denunciado la situación una y otra vez pero no nos han hecho caso”, manifestó enojado.

Según denuncian, la situación se agrava cuando en los días de lluvia la nubosidad hace más oscuros los salones y los niños tienen que ser enviados a sus casas.

“Los salones de kínder no están preparados para funcionar sin energía eléctrica porque están completamente sellados”, dijo, por su parte, la maestra Sandra Machado Ríos.

“No hay suficiente ventilación y las ventanas son de cristal y solamente abren parcialmente. Es sofocante y hace muy difícil que podamos dar clases”, agregó.

Mantener las puertas y ventanas abiertas le ha permitido el paso a una “plaga de ratas”, que han hecho fiesta con los libros, libretas y demás materiales escolares.

Hay que desinfectar “a diario porque el orín de ratas es muy peligroso y tememos que los niños entren en contacto con alguna superficie contaminada”, dijo la educadora.

“Yo vivo en Barceloneta pero traigo a mis hijas aquí porque la calidad de educación que reciben es excelente. Lamentablemente, estos problemas dejan mucho que desear de las agencias que se suponen velen por las escuelas”, manifestó Ada Hernández Torres, madre de tres niñas, en octavo, quinto y tercer grado.

Hernández Torres dijo estar a favor del paro indefinido pues “se trata también de la salud y el bienestar de mis hijas”.

El grupo también denunció la falta de empleados de mantenimiento, reclamando que los únicos dos conserjes que trabajan allí no dan abasto.

Oyola Martínez dijo, además, que las condiciones insalubres del plantel han propiciado un brote de impétigo en más de 50 alumnos.

“Nosotros tenemos muchos estudiantes aquí, la mayoría de escasos recursos, que merecen recibir una educación de calidad en un ambiente agradable y que no sea dañino para su salud”, acotó.

En silencio

La semana pasada, mientras ocurría el paro de 48 horas que fue decretado por el magisterio en toda la Isla por los cambios al Sistema de Retiro, este medio entrevistó al director de la región educativa de Arecibo, Luis Rodríguez Ramos, quien en ese momento aseguró que todas las escuelas que supervisa estaban listas para comenzar el semestre escolar.

No obstante, Rodríguez Ramos no estuvo disponible días después para reaccionar a esta denuncia.