Las fuentes de agua del emblemático parque municipal La Cascada, en Trujillo Alto, son un criadero de mosquitos a poco más de un año y medio de haber sido inaugurado.

El agua de las fuentes es verde y tiene insectos y en el fondo de los estanques hay limo, por lo que representa un problema de salud para las personas que residen cerca o acuden a los comercios aledaños.

El proyecto municipal se encuentra al lado del centro comercial Plaza Encantada y de la exclusiva urbanización que lleva el mismo nombre.

Su apertura fue anunciada por el alcalde José Luis Cruz el 17 de diciembre de 2016 como una opción de entretenimiento para los niños y las familias, pero está cerrado desde mediados de julio de este año, en pleno verano y días festivos.

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Los chorros para los niños y la fuente cascada diseñada para que discurra el agua desde una pared 45 pies están inoperantes.

Su reapertura no será hasta nuevo aviso, según un letrero colocado en la entrada.

La directora de Relaciones Públicas, Desirée Ramos, indicó a este medio que los ingenieros realizan trabajos de mantenimiento pero no especificó cuáles.