Pastores en riesgo de sufrir agotamiento

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 17 años.
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En alto riesgo, pero bajo control.
Una investigación reveló que pastores de diversas iglesias en Puerto Rico están propensos a sufrir del síndrome de agotamiento extremo (SAE), pero muchos no presentan síntomas porque están satisfechos con el trabajo que realizan.
A pesar de que no demostraron niveles altos de los síntomas que presenta el SAE, el estudio realizado en una institución universitaria de San Juan sí reveló que el 50 por ciento se encuentra en alto riesgo de padecerlo porque muchos, aunque disfrutan de su trabajo, confesaron sentirse agotados y ansiosos.
La psicóloga clínica Heide L. Rodríguez Ubiñas y el sociólogo José Rodríguez Gómez estudiaron cómo se sentían los pastores, ya que tienen “un trabajo bien demandante, con muchos estresores, y pone en riesgo muchas veces su salud mental”.
“Toda la literatura señala que el trabajo pastoral es de alto riesgo por sus responsabilidades, tareas y manejo en términos de personas y situaciones de alta tensión. Cuando muere alguien, es a la primera persona que llaman. Cuando hay situación de crisis, también” dijo Rodríguez Gómez a PRIMERA HORA.
Agregó que los religiosos “se sobrecargan. Aparte de problemas sociales, no se les proveen muchas de las necesidades básicas, a veces no les han pagado, no tienen plan médico. Son situaciones que influyen sobre el estado y calidad de vida de este pastor o pastora”.
El estudio, que fue analizado por este diario, se administró a 120 pastores (96 hombres y 24 mujeres) de las iglesias Presbiteriana, Alianza Cristiana y Misionera, Discípulos de Cristo, Iglesia de Dios Mission Board, Bautista, Iglesia de las Asambleas de Dios y Pentecostal Ministerio Internacional. Éste reflejó que los religiosos boricuas están en alto riesgo de padecer del SAE.
“Están en alto riesgo. Sin embargo, notamos que no sufren de tanta sintomatología. El trabajo realmente los satisface, se sienten realmente seleccionados por el Señor, y es una protección contra los factores de estrés y tensiones”, agregó el sociólogo, quien indicó que usaron el instrumento Factores de riesgo en el desempeño pastoral.
Recordó que los religiosos cumplen con varios papeles a la vez, ya que son maestros, líderes espirituales, consejeros, predicadores y administradores. De hecho, dijeron que la dificultad mayor es con las tareas administrativas.
El síndrome de agotamiento extremo es un mal psicológico que manifiesta tres síntomas principales: cansancio emocional, cinismo y apatía, y reducción significativa de la autoeficiencia.
Sus síntomas principales son: tensión, ansiedad, depresión y cansancio extremo.