Abunda el “truco” al rendir la planilla contributiva.

Si las planillas reflejaran la realidad puertorriqueña, miles de matrimonios se hubiesen separado justamente el 30 de junio, gran parte de los asalariados serían patronos, y la población de “dependientes” se multiplicaría a pasos agigantados.

Para ahorrar miles de dólares anuales en impuestos, los puertorriqueños se ingenian trucos y malabares dirigidos únicamente a eludir al menos parte de su responsabilidad fiscal. El Departamento de Hacienda es consciente del problema -que desangra el fisco- aunque la tarea de fiscalizar a todos los ciudadanos infractores resulta sumamente difícil e improbable ante el complicado sistema contributivo del país.

Muchos ciudadanos, que enfrentan una tasa contributiva de 33 por ciento al devengar más de $50,000 anuales, asumen el riesgo de ser investigados por intentar atajar de alguna manera todo el dinero que pagan al Gobierno, ya sea por los servicios esenciales, por el impuesto sobre ventas y uso (IVU) y por otros tributos que se aplican a los vehículos o las propiedades que terminan por socavar el bolsillo del contribuyente.

“Tiene que haber mejor fiscalización, pero muchas personas no pagan porque no pueden. Claro, esto no está bien y todo el mundo debe cumplir con su responsabilidad” , sostuvo el presidente del comité de legislación del Colegio de Contadores Públicos Autorizados de Puerto Rico, Kenneth Rivera.

Pero, hacer “trampa” con la planilla parece ser uno de los irremediables pecados que el puertorriqueño comete cada vez que se acerca el temido 15 de abril.

Separados de embuste

Por ejemplo, matrimonios que intentan engañar a Hacienda pueden rendir individualmente como una pareja que se ha separado. Con esta fórmula, se divide el ingreso de la pareja, aún disfrutando de la mayoría de las deducciones de una pareja casada que reside en el mismo hogar.

Para poder aplicar la fórmula, el matrimonio alega haberse separado a seis meses de vencerse el año y así lo hace constar en sus planillas contributivas con su firma. La pareja reanuda su relación con el nuevo año.

“Mucha gente lo hace porque se requiere una auditoría bien concienzuda para detectar el engaño”, indicó Rivera.

Es un secreto a voces que muchos asalariados también se clasifican como patronos para aumentar sus deducciones. Por otro lado, muchos empresarios también intentan aumentar sus deducciones al contabilizar gastos personales como gastos de su empresa.

Cabe destacar que los asalariados pueden deducir un máximo de $1,500 en sus gastos profesionales, aunque no existe un límite para los patronos, siempre y cuando cada deducción sea legítima.

“Puerto Rico tiene muchos incentivos para las corporaciones, pero a nivel individual el sistema no es muy atractivo. Una persona que viene a trabajar en Puerto Rico de Estados Unidos usualmente paga más contribuciones”, indicó el especialista de una compañía de contabilidad.

Otro esquema es el de añadir dependientes que ya han sido incluidos por otros contribuyentes. La práctica suele ser bastante común entre personas divorciadas que no residen con el menor o hermanos que alegan que están a cargo del mismo progenitor.

Ante todas las obligaciones contributivas que enfrentan los negocios, muchos pequeños comerciantes también intentan subestimar o dejar de reportar la cantidad total de sales tax cobrada por su establecimiento.

Hacienda estima que unos 27,000 contribuyentes han contraído una deuda ascendente a $2,900 millones, de los cuales $793 millones pertenecen a corporaciones.

Se espera que las enmiendas contributivas para las planillas del 2009 comiencen a inclinar la balanza a favor del contribuyente promedio al permitir que los matrimonios rindan por separado sin una carga contributiva más onerosa.

Del mismo modo, la nueva ley facultará aumentos en las deducciones por dependientes, de $1,600 a $2,500. Las deducciones por gastos educativos de niños de kínder a sexto grado y de séptimo a duodécimo también aumentarían, de $300 a $1,500 en el primer caso, y de $400 a $3,000 en el segundo. Asimismo, las deducciones por cuido de hijos también subirían de $1,200 a $1,500.

Actualmente, la carga contributiva de una persona que gana más de $30,000 representa el 25% de su salario.

“La gente a veces no radica la planilla de seguro social, o del IVU, esperando que no los cojan”, añadió el experto.