Puerto Rico contará desde el viernes con un segundo puerto receptor de grandes barcos cruceros, ya que, desde el extremo opuesto de la isla, Ponce, la segunda mayor ciudad puertorriqueña, se sumará como puerto de escala para este tipo de barcos a San Juan, la capital.

Según anunció hoy la Alcaldía de Ponce, está previsto que el viernes llegue a esa ciudad del sur de Puerto Rico el primer barco, con 540 turistas a bordo, de la línea de cruceros de lujo Silversea Cruises.

Su alcaldesa, María Meléndez Altieri, dijo que cada persona que baje del barco se gastará una media de $118. Si desembarcaran todos los pasajeros -en su mayoría de más de 50 años-, la economía ponceña podría recibir una inyección directa de unos $60,000 por cada atraque.

El barco que va a atracar en Ponce a partir del viernes es el Silver Spirit, procedente del puerto de Fort Lauderdale, a las afueras de Miami (Florida) y después de haber hecho una parada en Cayo Hueso (Key West, Florida).

Además de sus 540 pasajeros, cuenta con una tripulación de 376 personas, según detalló hoy a Efe Glorisel Torres, de la Oficina de Turismo de Ponce, quien explicó que se ha preparado todo un programa de actividades a modo de recepción en el área del puerto.

Así, no faltará un espectáculo de bomba y plena, ambos géneros de música autóctona, así como de los tradicionales "vejigantes" y cabezudos. También habrá una muestra gastronómica y artesanal y se ofrecerá la degustación de ron y café, dos de los productos más representativos de la producción local.

A las autoridades no se les escapa que su llegada coincide con el "Black Friday" (Viernes Negro), el día siguiente al de la celebración de Acción de Gracias y tradicionalmente el de mayor consumo del año en EE.UU. y Puerto Rico.

La siguiente visita del mismo barco tendrá lugar el 26 de diciembre, un día después de Navidad.

"Exhortamos a los comerciantes a hacer acopio de material suficiente y crear diversas ofertas para beneficiarse de la jornada. También exhorto a todos los ciudadanos a que, como hemos demostrado siempre, seamos los mejores embajadores de esta ciudad", pidió hoy la alcaldesa.

Se espera la llegada de un total de siete cruceros durante las próximas tres temporadas, todos de la línea Silversea Cruises, que apuesta con este crucero por destinos poco saturados y clientes de un nivel adquisitivo más alto que la media de los que llegan a San Juan.

La Alcaldía de Ponce -que llevaba más de dos años sin recibir ningún crucero- sigue negociando con otras empresas para tratar de aumentar ese número y potenciar así la economía de una ciudad cuyo nombre honra a Juan Ponce de León y Loaiza, nieto del conquistador español Juan Ponce de León.

Este municipio. conocido también como la "Ciudad de los Leones" es el segundo más grande de Puerto Rico en extensión territorial y el segundo con más población, después de la zona metropolitana de San Juan.

Entre sus atractivos cuenta con una mezcla estilos arquitectónicos que se remonta a la época colonial española, su moderno Museo de Arte y el Castillo de Serrallés, una mansión de los años 30 de la familia fundadora de la destilería que fabrica el ron Don Q y que forma parte del Registro Nacional de Lugares Históricos de EE.UU.

A los turistas también se les ofrecerán visitas a la cercana isla conocida como Caja de Muertos, a las aguas termales de Coamo, rutas en kayak y un tour por la Hacienda Buena Vista de café, además de sus clásicas playas caribeñas.

Este arranque de Ponce tiene lugar tan sólo una semana antes de la fecha prevista para la inauguración de un muelle en el puerto de San Juan que ha sido agrandado para que pueda recibir cruceros de hasta 7,000 pasajeros.

Se prevé que el día 4 de diciembre atraque ahí el segundo crucero más grande del mundo, Quantum of the Seas, de Royal Caribbean y con capacidad para 6,000 pasajeros. Esta embarcación tiene programadas 19 paradas en Puerto Rico para el año entrante.

En lo que va de año la isla ha recibido más de 254,000 cruceristas, según recientes cifras del secretario de la Gobernación y exdirector ejecutivo de la Autoridad de los Puertos, Víctor Suárez, que dijo recientemente que "la industria de cruceros ha vuelto a renacer en Puerto Rico".

El Gobierno asegura que este sector deja en la isla cada año $200 millones, una cantidad que es muy bien recibida por la delicada economía puertorriqueña que acumula ocho años en recesión o estancamiento y una ingente deuda emitida en los mercados.