Desde las lluvias torrenciales a finales de abril, la tierra aledaña a la carretera PR-5, en Naranjito, permanece abierta, amenazando particularmente a los residentes de la barriada La Marina.

Y es que, a finales de abril, llegó a caer hasta siete pulgadas de lluvia en algunas zonas de Naranjito, según estimados del Servicio Nacional de Meteorología (SNM) en San Juan, provocando así un socavón justamente por el semáforo del hospital municipal.

Con el pasar de los meses, la ciudadanía ha levantado bandera cuestionando si los trabajos están detenidos, aseveración que el alcalde Orlando Ortiz Chevres rechazó.

“No es que esté detenido, es que esto requiere diseño y, en el diseño, hay permisología envuelta. Esto es un cuerpo de agua. Estamos hablando que es una quebrada que desemboca en el río principal de Naranjito, así que todo eso está de manera acelerada. Lo que se está haciendo (ahora) es trabajos de seguridad y mitigación, velando que la quebrada siga su cauce y, si hay lluvia, eso también pone en peligro la situación”, reiteró el funcionario a Primera Hora.

Por tratarse de una vía estatal, es la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT) que se hará cargo de la reconstrucción. En declaraciones escritas enviadas a este diario, la agencia aseguró que “desde el mismo día del evento” trabajan para atender la situación junto al municipio.

“Como primera fase nos dedicamos en contener la fuente del problema y proveer una alternativa segura para todos los ciudadanos”, explicó la agencia.

Al momento, los trabajos están en etapa de diseño, cuyo costo estimado aún se desconoce. La empresa encargada de este diseño es José A. Batlle y Asociados PSC. Al día de hoy, no hay fecha para la culminación de los trabajos de reparación.

“El proyecto se encuentra actualmente en etapa de diseño para mitigar como segunda fase y de manera inmediata el problema de emergencia más apremiante, que es evitar que se siga afectando la carretera PR-5. Estamos en espera de que lleguen los materiales para comenzar en las próximas semanas”, detalló la ACT.

“Mientras tanto, se trabaja en el diseño de la obra permanente de un drenaje que corregiría la situación de la carretera, esto mientras se trabaja simultáneamente con los estudios hidrológicos y de mensura que requieren la solución permanente”, agregó.

“Ya el contrato de diseño fue contratado por Carreteras. Los trabajos que se están haciendo allí son mantener la mitigación, la seguridad, el agua que retiene, porque hay que estar desviándola, sacándola. Una vez finalice el diseño, entonces comenzar la construcción”, reiteró Ortiz Chevres.