El dispensario de cannabis The Family Dispensary, Inc., en Bayamón, reabrió hoy sus puertas al mediodía, tras permanecer cerrado por 41 días, luego de que el municipio les revocara el permiso de uso, informó su presidenta Emely Chaparro.

Ya son muchos los pacientes que hacen fila para poder seguir con sus tratamientos, aunque algunos, en medio del cierre, recibieron servicios en otros dispensarios.

El pasado 10 de marzo, la representante Milagros Charbonier se presentó al establecimiento para una vista ocular y allí señaló, según reza la demanda presentada el 30 de abril por Chaparro, que el permiso de uso del dispensario había sido expedido para la venta de artículos de primera necesidad y no para dispensar cannabis medicinal.

Sin embargo, el abogado de la parte demandante, Godwin Aldarondo, señaló que el concepto de “artículos de primera necesidad” incluye alimentos y medicamentos con o sin receta, según definido por el Departamento de Asuntos del Consumidor.

Tras la presentación del recurso para que se dejara sin efecto la orden del Municipio, de paralización de uso y cierre, además de pedir restitución de daños, se realizó una vista en la que los abogados de ambas partes hablaron “y el municipio de Bayamón se allanó al injuction”, confirmó Chaparro.

Aún queda por dilucidar otra parte de la demanda, que incluiría las pérdidas que tuvo el negocio luego de cerrar, incluyendo la seguridad que permaneció allí desde el primer día de la clausura.

“Hay otra parte todavía, de la que no puedo hablar porque el asunto no ha culminado. Hay una sentencia preliminar donde expresa que el municipio se allanó a nuestra petición, que acepta las condiciones…”, dijo la presidenta del dispensario quien recordó que en todo momento su postura fue “arreglar lo que había que arreglar y atemperarlo a lo que fuera necesario”.

En cuanto a los 448 pacientes que ya se habían atendido en el centro, sostuvo que estos fueron atendidos en otros dispensarios, según el compromiso que hicieron con el Departamento de Salud (DS).

Ella se mantuvo en comunicación para confirmar las dósis e información de cada paciente.

Algunos pacientes, esperanzados, optaron por esperar la reapertura del dispensario.

“Esto ha sido algo tan y tan maravilloso que lo digo y lloró de la emoción. La gente nos ha llamado, nos han dado su apoyo, han hecho círculos de oración, han ido al tribunal, nos envían cientos de firmas”, indicó Chaparrro al adelantar que hoy, a las 6:30 de la tarde, tienen un coctel para los pacientes, familiares y personal de la industria, en agradecimiento por el apoyo recibido.

Sobre la posibilidad de que vuelvan a cerrar el lugar, la comerciante que administra el dispensario junto a su familia, dijo que “la posibilidad puede existir, para mí o para cualquier persona que esté en la industria; pero estoy esperanzada en que entendemos que hicimos lo correcto y que nuestra postura es, mientras tengamos la alternativa de servir lo vamos a hacer”.

De otro lado, y en cuanto a la propuesta de Charbonier para imponer una moratoria a las licencias de la industria actual del cannabis, Chaparro sostuvo que le preocupa porque también incluye una moratoria para los pacientes.

Uno de los proyectos establece una moratoria en la otorgación de licencias bajo el Reglamento Núm. 8766 del 2016 hasta tanto se establezca un marco legal adecuado y riguroso para la industria del cannabis medicinal y que se prohíba la venta y distribución de la flor, comúnmente conocida como “moña”, de la planta cannabis.

Sin embargo, e inmediatamente tras la propuesta, Elías Sánchez, representante del gobernador ante la Junta de Supervisión Fiscal (JSF), dijo (WKAQ) que una moratoria sería contraria al compromiso programático del Partido Nuevo Progresista.

“De ninguna manera se va a paralizar un proceso (la reglamentación) contra el otro (legislar). Eso no es consistente con lo que se trabajó, con el compromiso público del PNP… si entra una moratoria se actuaría en contra del compromiso programático, de la palabra empeñada", sostuvo.