Aunque al momento las autoridades no han observado que sea un asunto que esté ocurriendo de manera extendida, sí hay ya varias personas que han terminado en los tribunales por haber falsificado tarjetas de vacunación para hacer creer que están vacunados contra el COVID-19.

Según explicó Jesús Hernández, director de la Oficina de Investigaciones del Departamento de Salud, la falsificación de tarjetas de vacunación “ha sucedido”, y es una de las razones por las que “nos hemos mantenido vigilantes en actividades multitudinarias” y otros lugares para detectarlo.

Hernández recordó que, de hecho, hubo un caso que ganó notoriedad, de una joven que quizo ingresar a un evento con una tarjeta de vacunación falsa, en la que “había alterado la segunda dosis”.

“Otros casos han salido por la ciudadanía, que ha cooperado con nosotros y ha dado información, sean patronos, sean individuos, que nos llaman y dan la información”, comentó el oficial.

“Por eso hemos enfatizado en pedir la ayuda de la ciudadanía para dar con esas personas. Es importante esa cooperación”, resaltó.

Agregó que aun cuando en ocasiones reciben información de personas que creen está ocurriendo un delito, pero luego resulta que no es así, “o por cosas que se riegan en las redes sociales”, comoquiera “no queremos desalentar esa cooperación de la ciudadanía”, que resulta esencial para dar con quienes están cometiendo esos delitos.

Agregó que “hemos tenido casos, y aprovecho y doy las gracias, que salen por el trabajo con otras agencias. Uno fue una detención de tráfico por un policía municipal, y cuando está en el proceso de pedir la licencia y el caballero abre la guantera del vehículo, se caen todas las tarjetas de vacunación, y no tenía ninguna autorización para tener esas tarjetas. Una infracción de tráfico y salió un caso que fue atendido y que está ahora en proceso con dos personas en los tribunales”.

Hernández comentó que, además de las tarjetas de vacunación falsas, también “hemos tenido casos de pruebas de laboratorio falsas”.

“Hemos visto casos de empleados que van a un lugar y presentan documentos falsos y el patrono se da cuenta y dice esto no es correcto, y llaman a validar, y levantamos expedientes. También hemos visto en instituciones sin fines de lucro, en instituciones deportivas, en laboratorios, que nos avisan”, explicó.

“Hay otros casos de padres, que insensiblemente han alterado pruebas de laboratorio para que sus hijos vayan a jugar en pequeñas ligas. Eso lo hemos tenido”, añadió Hernández.

“Son casos que no se quieren hacer las pruebas de laboratorio frecuentemente, o papás con hijos en pequeñas ligas o en otras actividades deportivas, que están haciendo eso (usando pruebas de laboratorio falsas), pagando por esas pruebas (falsas). Hemos tenido confidencia a esos efectos. Es algo que ha estado ocurriendo”, sostuvo el oficial.

“Tenemos un ‘check point’ (punto de cotejo) aquí en el Centro de Convenciones, y en esos ‘check points’ han tratado de entrar con tarjetas falsas y pruebas de laboratorio falsas”, indicó.

“Gracias a los ciudadanos que dan las confidencias es algo que hemos estado vigilando desde el día uno (de la pandemia). Estamos vigilantes y verificando este tipo de delito en todos los lugares donde intervenimos”, agregó el oficial.

“No puedo decir que sea un problema grande, extendido, más bien son hechos aislados, pero han estado sucediendo. Y lo hemos detectado, y hemos actuado”, insistió.

Agregó que tampoco “puedo establecer que estemos vigilando a un grupo específico” que se esté dedicando a este delito. “Son gente que lo hace, pero no es que haya un grupo criminal vendiendo esto. No ha llegado a eso, ni hemos tenido una confidencia al respecto”.

Comentó además que la frecuencia en la que han detectado esos casos depende en buena medida de las guías que establecen cada entidad, y cuando se tornan más restrictivas, “ahí es que la gente empieza a falsificar documentos”.

Hernández aprovechó para exhortar a cualquiera que esté considerando usar tarjetas de vacunación o pruebas de laboratorio falsas a que desista de hacerlo.

“La ley dice que por falsificar esos documentos puedes tener hasta 8 años de cárcel. No hay necesidad alguna de hacer este tipo de fraude”, afirmó.

“No hay razón para esto. Te estamos dando la vacunación gratis, las pruebas gratis o que las puedes pagar. ¿Y tú quieres ir preso? De verdad, no hay razón para hacer algo así”, insistió.

Aunque por diversas razones no todos los casos detectados han terminado en los tribunales, Hernández indició que, al momento, están en proceso en los tribunales, o se han declarado culpables, 8 casos de personas por tarjetas de vacunación falsas y 17 por pruebas de laboratorio falsas.

El oficial del Departamento de Salud llamó a la ciudadanía a mantener la cooperación y confidencias sobre cualquier situación salubrista, comunicándose al 787-522-6300, o a través del correo electrónico investigaciones@salud.pr.gov.