El artista José L. Díaz de Villegas falleció en la madrugada de ayer, confirmó su hijo y portavoz de la familia, José Luis Díaz de Villegas Freyre.

Díaz de Villegas llevaba enfermo varios meses y paulatinamente empeoró, indicó José Luis. Padecía de cirrosis y diabetes aunque su hijo entiende que su causa de muerte, mientras dormía, pudo haber sido un fallo renal.

La obra por la que fue conocido este creador nacido en La Habana, Cuba, el 19 de octubre de 1925, se divide en varios aspectos, desde ilustrador, diseñador gráfico y artista plástico con trabajos que se exhibieron en museos y galerías. En el diario El Nuevo Día trabajó durante 30 años como director gráfico, entre otras posiciones, y muchos siguieron sus columnas de vinos y comida publicadas en ese diario hasta principios de este año, que firmaba bajo el seudónimo de Paco Villón. Su obra también está contenida en libros como Puerto Rico: La Gran Cocina del Caribe, que trabajó con Jochi Melero y su hijo, José Luis.

“Su última columna salió en febrero, fue sobre el Super Bowl, y él hubiera escrito hasta el día que murió si su enfermedad se lo hubiera permitido. Me decía a cada rato, ‘Tengo que hacer la columna, tengo que hacer la ilustración’ pero ya estaba enfermo. La mayoría quisiéramos tener la mitad de capacidad de trabajo y afán que él tuvo”, destacó su hijo en torno a su filosofía de trabajo.

El fotógrafo Jochi Melero, con quien trabajó proyectos como un cortometraje en los setenta, manifestó que Díaz de Villegas le deja a quienes lo conocieron la alegría de la capacidad para hacer, la alegría sobre la autenticidad de ser.