Todavía no se asienta la polvareda luego de que el FBI fuera a investigar por alegaciones de fraude a la compañía Mendez Internet Management Services, Inc. (MIMS), y ya muchos se preguntan qué otros negocios podrían oler a fraude y cómo identificarlos.

Dinero en mano es dinero seguro, pero jugárselas con promesas de enriquecimiento fácil es algo que hacen inversionistas y arriesgados. Con el clima económico actual, es mejor aguantarse hasta estar plenamente seguro de dónde pones tu dinero.

1. Una cosa “segura”: No existe nada seguro ni sin riesgos al momento de invertir. Si te dicen que verás grandes dividendos, no tendrás pérdidas y los chavos te van a llover, ni siquiera lo intentes.

2. “Un hermano me dijo…”: Cuando la promesa de negocio viene amarrada del credo (o raza, u orientación sexual) tendemos a bajar la guardia porque viene de uno de “los nuestros”. Ojo: verifica el negocio desde afuera, sin apasionamientos, para asegurarte que sí vale la pena.

3. “Nuevo y mejorado”: Cuidado con los negocios o invenciones de los que nadie ha escuchado. Si estás seguro de que es el invento del siglo y tienes el dinero para ser un mecenas, pues lánzate, pero primero coteja que no esté licenciado por otra persona.

4. El silencio NO vale oro: Si no te explican cómo va a generarse el dinero, cómo sostenerse en momentos de crisis financiera y en qué se está invirtiendo, no te envuelvas.

5. Ahora o nunca: Si empiezan a hostigarte con que des los $5 mil ahora o perderás la oportunidad, huele a pescaíto. Cualquier negocio serio te permitirá estudiar con calma la oferta y si te conviene involucrarte.

6. El príncipe de Persia: o de Nigeria, o de donde sea en una remota parte del planeta que te manda un e-mail con la siguiente línea: “Me están buscando para asesinarme y necesito dinero urgente para salir del país. Mándame $10 mil y te enviaré $2 millones en cuanto esté afuera”. O algo así. ¡Cuánta gente cae de incauta por la promesa de millones!

7. No todo lo que brilla…: Si suena demasiado bueno para ser cierto, usa el sentido común. Investiga bien, verifica si personas respetadas en el mundo de los negocios están involucrados, lee los comentarios, etc. Si al final estás contento y tienes el dinero, pues la decisión es tuya.

Fuente: Forbes.