El portavoz alterno de la delegación del Partido Nuevo Progresista (PNP) en la Cámara de Representantes, Urayoán Hernández Alvarado, dijo esta mañana que estará viajando próximamente a la capital federal para reanudar su lucha contra la prohibición de las peleas de gallos en los estados y territorios de la nación, incluyendo a Puerto Rico.

Según El Nuevo Día, el acuerdo de un comité de conferencia que el Congreso llevará a votación final esta semana propone extender a Puerto Rico y los demás territorios la prohibición en contra de las peleas de gallos, una enmienda que fue aprobada en votación de 359-51 y de forma bipartidista.

Hernández ha sido uno de varios legisladores que han hecho gestiones para tratar de que este tipo de enmienda no se apruebe en el Congreso.

“Todos saben de mi compromiso con la industria del gallo, el llamado Deporte de Caballeros’. Hoy voy a redoblar esfuerzos para evitar que esta prohibición se convierta en algo final y firme. Estaré visitando Washington DC próximamente para llevar el mensaje a los integrantes del nuevo Congreso que juramenta en enero. El mensaje es uno simple y contundente: excluir a Puerto Rico de esta nefasta prohibición. No voy a permitir que se pierdan empleos de puertorriqueños por una decisión arbitraria tomada en la capital federal”, comentó el representante por Orocovis, Barranquitas, Vallaba y Coamo.

El representante estadista también hizo un llamado a los propietarios de galleras, así como a toda persona involucrada en este vital sector de la economía local, a unirse al reclamo escribiendo cartas a los Senadores y Representantes que integraran el nuevo Congreso.

“Hago un llamado urgente a toda persona que sea parte de esta boyante industria que tanto ha aportado y continua aportando a nuestro Puerto Rico, a que contacte a los congresistas, tanto senadores como representantes, y les lleven el mensaje de la devastación que causaría esta acción totalmente innecesaria. El momento es ahora. Escríbanles, envíen correos electrónicos, llámenlos, que sepan que existe un pueblo indignado y que no se someterá”.

“Lo que está en juego es una industria que genera unos 12,250 empleos directos, otros 15,000 de manera indirecta. Esta industria genera cada año sobre $87 millones en actividad económica, dinero que se queda aquí, en nuestra Isla, para ser reinvertido en nuestras comunidades”, agregó Hernández Alvarado. En el pasado se ha divulgado la cifra de $18 millones.

“Puerto Rico no puede darse el lujo de perder esta fuente de ingresos, de trabajos, de cultura y menos en estos momentos cruciales para la recuperación de nuestro pueblo”, finalizó diciendo el líder estadista de la montaña.