Si mata el puerco en el patio de la casa, no lo venda, es ilegal

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 16 años.
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El lechón se coge, se mata y se pela, se pone en la vara y se le da candela. Literalmente, eso es así. Pero, ¡ojo!... Tenga cuidado. Por si no lo sabía: no lo puede matar en su casa para venderlo, porque es ilegal. Sólo lo puede matar en el patio para su consumo personal.
Si mata el puerco clandestinamente para venderlo, podría encarar multas o hasta puede ir preso.
Aunque la práctica está reguladada, mucha gente todavía lo hace, particularmente en los campos. Unos, tal vez, por economizarse el dinero que hay que pagar en un matadero y otros, porque lo consideran como parte de una tradición familiar.
En Puerto Rico actualmente hay cinco mataderos,ubicados en Mayagüez, Yauco, Arecibo, Guaynabo y Naguabo.
“Matar el cerdo en la finca es algo de tradición y más en esta época, igual que preparar las morcillas, los pasteles, el cuajito y todo lo demás. Es algo de tradición”, dijo el porcicultor de Guayama y también trovador Fernando Sanabria.
Eddie Clavell, otro porcicultor de Yauco, dijo que para llevar un cerdo a un matadero hay que tener un camión refrigerado para poder recogerlo.
Añadió que quitarle la vida a un cerdo en un matadero cuesta entre $17.00 y $25.00, dependiendo del tamaño.
La coordinadora de la Oficina para la Reglamentación de la Carne de Cerdo, Luz M. Femus, dijo que tiene conocimiento de que por lo menos 25 agricultores los compran para matarlos “en el patio como dicen por ahí”.
Narró que recibió una confidencia de que con la parte de abajo de una botella sellan la carne para que parezca el sello de USDA para mercadearla en supermercados y carnicerías.
Remus indicó que la Ley 81 de de 1912, enmendada en 1976 y 1977, y el reglamento 60-90 del Departamento de Salud prohíben las matanzas clandestinas de puercos.
“La ley dispone que si se mata en el patio, ese animal es para consumo propio, no para mercadear”, sostuvo la funcionaria.
Indicó que tanto el reglamento como el estatuto aluden a las enfermedades asociadas con la carne de cerdo cruda o mal cocida como la tenia, toxoplasmosis, triquinosis, las provocadas por la baceria Yersinia y tuberculosis. “Cuando se lleva este animal al matadero hay un veterinario y estas enfermedades se detectan”, dijo.
Añadió que las matanzas clandestinas también conllevan otros riesgos potenciales a la salud porque se pueden encontrar agujas rotas o fragmentos en la carne, huesos rotos, astillas de madera o vidrios que se ha enterrado el animal o perdigones de escopeta que le hayan disparado al cerdo.
Advirtió además sobre otros peligros químicos como: residuos de drogas, antibióticos, químicos agrícolas para el control de plagas, parásitos, toxinas, hongos y bacterias.
Los violadores de la ley pueden encarar una multa no menor de $25 ni mayor de $500, seis meses de cárcel o ambas penas.
“Todo animal que se mata se tiene que llevar a un matadero. Los que lo hacen clandestinamente no es legal”, dijo el secretario de Agricultura, Javier Rivera Aquino.