Voluntarios continuaban esta mañana realizando esfuerzos para remover la gran masa de sargazo que se ha acumulado en las pasadas semanas en la zona de Las Croabas en Fajardo.

Ciudadanos, compañías privadas, comerciantes de la zona, el municipio de Fajardo y el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) han unido esfuerzo desde hace unas semanas para tratar de mitigar el impacto que ha tenido la abundante llegada de estas algas flotantes a la zona, lo cual pone en peligro tanto la vida marina en la costa como la actividad turística y la actividad económica de la zona.

No obstante, no se tiene claro si llegará la barcaza que espera el DRNA para remover la materia orgánica del agua. Aun así, los trabajos en la zona no han cesado.

Gustavo Quiñones, uno de los organizadores de estos esfuerzos y quien con su carretilla y demás herramientas ha estado removiendo el sargazo durante los pasados días, explicó a Primera Hora que los trabajos que iniciaron en el área del canal, con la ayuda de cerca de 40 voluntarios, ahora se encuentra enfocados en el área de la bahía.

“Se comenzó en la entrada del canal para poder nosotros acceder la laguna y evitar que el sargazo continuara migrando para dentro de la laguna, tuvimos que despejar el canal. Se despejó esa área y ahora estamos en esta zona de la bahía”, explicó el joven, quien labora para la empresa de kayaks Bio Bay Tours, pero que ha estado coordinado los esfuerzos entre diversos sectores.

Aunque en esa primera etapa, comerciantes de la zona, múltiples compañías de tours del área y voluntarios de toda la Isla respondieron al llamado realizado a través de las redes sociales, Quiñones asegura que en los últimos días la cantidad de voluntarios se ha reducido.

No obstante, tanto el municipio de Fajardo como la empresa privada Vivot Equipment Corporation, dedicada al alquiler de maquinaria en el Caribe e Islas Vírgenes, han dicho presente para asistir en esta segunda fase.

“Tuvimos en cierto punto aproximadamente entre 30 y 40 personas, durante 3 días consecutivos para poder sacar todo ese sargazo de la entrada del canal. Ya para la próxima etapa del proyecto que es en la bahía ya no hubo tantos voluntarios, pero vino el municipio y contribuyó con sacar lo que ya habíamos sacado de la bahía”.

“También estos caballeros (empresa Vivot Equipmente Corp.) anteayer (jueves) bajaron desde Peñuelas con sus maquinarias, con sus operadores para ayudar estos últimos días y han sacado, yo me atrevo a decir que de un 30 a un 40% del sargazo que ya había aquí. Ayer se hicieron como 10 a 12 viajes, ya estamos al punto de donde nos designaron el área no tenemos espacio en el área designada y estamos legislando más espacio para poder seguir sacando esto del agua”, detalló el joven, quien al final de nuestro recorrido nos confirmó que Recursos Naturales les concedió otra zona para poder disponer del material orgánico que estaba siendo depositado en unas tierras del Fideicomiso.

Por su parte, el director de sistemas de información de Vivot Equipment Corp., Moisés Morales, afirmó que la empresa ha puesto a disposición sus maquinarias y personal especializado para ayudar en el recogido estos dos días (viernes y sábado), lo que ha representado una inversión de miles de dólares.

“La primera encomienda fue por dos días y lo estamos haciendo gratis, pero incurrimos en unos gastos significativos. En diesel solamente estamos gastando $500 a $600 dólares de las dos máquinas. Sin contar la mano de obra de los choferes, el mantenimiento de los equipos. Aquí pueden haber de $6,000 a $7,000 dólares diarios en solamente diesel y mano de obra”, sostuvo Morales.

Cabe destacar que en horas de la mañana, el municipio de Fajardo llegó a la zona con un camión para suplirle diesel a las maquinarias y que así se pudiera dar continuidad a las labores.

Una labor fuerte, pero con delicadeza

El trabajo de la decena de voluntarios y de esta empresa ha sido arduo y, aunque aseguran que la madre naturaleza ha colaborado con la marea y la dirección del viento, es importante establecer una vez limpian un área, el sargazo continua acumulándose en la zona.

“Ayer limpiamos toda esta área completa, la marea volvió y la llenó nuevamente. Aquí estamos dándole continuidad al asunto. Esto es un reto, es mucho. (Se ha sacado) una docena de troces, ¿cuántas toneladas de material? No sé decir cuanto pesa en libras, pero ha sido bastante, ha sido significativo. Nos quedamos sin espacio en el primer lugar donde nos designaron. Entiendo que ahora Recursos Naturales nos está asistiendo con eso y vamos a seguir hasta que el día nos dé”, dijo el funcionario.

Mientras Primera Hora estuvo en la zona, la maquinaria de la empresa Vivot reagrupaba el sargazo de la bahía con suma calma y superficialidad, lo que contrasta con las usuales funciones de este tipo de maquinaria pesada. Esto, por tratarse de una reserva natural. Por lo que este tipo de labores es catalogada por Morales como una “delicada.

“No es complicado, es delicado. Es una reserva natural y no se puede ir muy profundo ni nada. Pero es posible, no está haciendo ningún tipo de efecto. Como ustedes ven es por encima, es superficial. Han hecho un trabajo fenomenal, es una delicadeza lo que están haciendo”, dijo.

En el caso de Quiñones, quien con su carretilla y esfuerzo manual ha estado liderando este movimiento ambiental, exhorta a las agencias a buscar soluciones reales para beneficio de todos.

“Aquí no fue hasta que involucramos el sacrificio de la labor comunitaria, las redes sociales fue que vinieron las agencias a ayudarnos y ahora todavía nos queda trabajo, no solamente remover el resto de este sargazo sino mantenerlo así. Exhorto a que si quieren soluciones hay soluciones, hay que todos colaborar y todos llegar a una solución en conjunto…. De aquí comemos todos, de aquí comen los pescadores, come el turista, comen los de los restaurantes. Aquí comemos todos”, dijo el voluntario.

Recomendaciones y usos beneficiosos del sargazo

Por su parte, Ricardo Colón, oficial de manejo del Corredor del Este y de varias reservas naturales de la zona, quien está orientando a los voluntarios que recogen el sargazo en Las Croabas, afirma que la remoción del material orgánico debe hacerse bajo ciertas medidas de seguridad para proteger la zona y diversas especies.

“Toda actividad de limpieza tratamos de que sea coordinada. Lo primero que se evalúa es que no haya nido de tortugas marinas (carey o tinglar). Lo otro que hay que estar bien pendientes es como se limpia, no se puede usar máquina pesada que destruya la costa, preferiblemente (se debe hacer) una remoción manual. Y, en el caso de que se tenga que usar maquinaria, que sea bajo la supervisión del Departamento de Recursos Naturales, para asegurarse de que no haya impacto”, estableció el experto.

Según Colón, el depositar el sargazo en el vertedero no tiene ningún impacto ecológico, aunque recomienda que sí se deben aprovechar sus beneficios reusándolo en otras instancias. “Siempre se fomenta que se le de algún tipo de uso como composta, agricultura o algún otro tipo de uso. Siempre queremos evitar que llegue algo al vertedero, pero para eso va a depender que la gente lo venga a recoger y lo use, lo cual no necesariamente está pasando. Pero, no es algo que cause toxicidad ni un problema en el vertedero ni nada. Realmente una vez el sol lo seca, deja de apestar y se pudre y pierde su volumen rápidamente”, sostuvo.

En cuanto a la utilización de la barcaza, aunque aún no se ha utilizado en la zona de Las Croabas, Colón establece que éste es el método más eficaz para atender esta acumulación ahora y en el futuro.

“La barcaza recoge el sargazo mientras este todavía está flotando en el agua, antes de que se le dé la oportunidad de que se pudra. Entonces, se lleva esa barcaza a donde se pueda coger y sacar en un camión o lo que se vaya a hacer con el sargazo. Es básicamente el método universal en muchos lugares del Caribe, la costa del Golfo de México y el sur de los Estados Unidos. Ya hay muchas compañías que se dedican exclusivamente a esto reconociendo la oportunidad económica porque esto es un problema que va a seguir ocurriendo”, sostuvo el oficial, quien posee un doctorado en Manejo de Ecosistemas.

En el caso específico de Las Croabas, Colón explicó que, por ser una bahía, se hace más fácil establecer un plan preventivo para tratar de evitar que, en un futuro, las costas vuelvan a sufrir de estos peligrosos eventos de acumulación masiva de sargazo.

“Lo que quisiéramos lograr en el área de Las Croabas es combinarlo con unas barreras flotantes que detienen la masa y entonces la barcaza iría a limpiar la barrera flotante. En el caso de Las Croabas y de los balnearios que son en forma de media luna, pues ahí hay maneras de bregar con esto antes de que llegue a la playa porque sabemos por dónde va a entrar. Pero hay otros lugares que, si la playa está expuesta al mar directamente, no hay un lugar donde pueda decir pongo una barrera aquí porque por aquí va a entrar”, detalló el experto.

No obstante, esta acumulación de sargazo proveniente de las costas de Brasil está llegando, no solo a Fajardo, sino a diversas zonas, sobre todo en municipios como Culebra, Humacao, Yabucoa, Ponce, Guánica, La Parguera e Isla de Mona. Además, asegura haber divisado acumulación de algas en dos zonas del área norte, lo cual asegura “no es usual”.

“Se da en el sur y en el este normalmente porque la masa de sargazo que nos está afectando viene en esa dirección, se acumula en la costa norte de Brasil, lo que sería nuestro sureste, y de ahí entonces las corrientes las van llevando hacia el noroeste. O sea que, por la dirección del movimiento de la masa, la parte más afectada de Puerto Rico es el sur y el este”, agregó.

¿Es malo el sargazo? ¿Qué hacer con el?

El experto en manejo de ecosistemas primeramente establece que el sargazo, cuando se encuentra en altamar, es sumamente importante para el ecosistema marino.

“Cuando el sargazo está en cantidades normales en altamar es un hábitat crítico, tan importante como lo puede ser un bosque, un manglar, un arrecife de coral”.

“En esos parchos de sargazo se suelen reproducir el dorado que es importante tanto para el consumo como para la pesca deportiva. (También) ofrece protección a tortugas marinas neonato (pequeñas) que llegan a altamar desde la playa y se refugian en esos parchos. Un sinnúmero de invertebrados, los caballitos de mar también se reproducen en esos parchos de algas. Así que es un excelente hábitat flotante y provee protección a especies pequeñas o juveniles de especies en lugares donde no hay isla, donde no hay terreno o donde no hay manglares”, planteó.

No obstante, lo que se está viviendo en varias zonas de la Isla es producto de la acumulación excesiva de esta materia orgánica en la costa, lo que redunda en problemas tanto ecológicos como sociales y económicos.

“Cuando se descompone, en el proceso, se consume el oxígeno en el agua y eso es lo que causa la mortandad de peces. Acidifica el agua también, eso es que le baja el pH y aumenta la acidez de agua, lo que también tiene un efecto negativo”. “

(También) bloquean la luz que entra a la columna de agua, la misma fricción de la masa flotante, por ejemplo en un arrecife de coral que es bien delicada la superficie, pues la misma fricción puede causar problemas”, detalló Colón.

En la zona de Las Croabas el DRNA ha podido constatar la muerte de muchos invertebrados, cangrejos, unos cuantos peces. Además, este evento ha tenido un impacto en la bioluminiscencia de la laguna de Las Croabas, aunque Colon asegura que “ya se está recuperando”.

No obstante, según Colon hay posibilidades de convertir “el problema en una solución”.

“Como cualquier materia orgánica que llega en grandes cantidades, tiene muchas posibilidades de usarse como composta en la agricultura, como cobertora de cultivos, biocombustible y he visto artículos que exploran la posibilidad de hacer materia prima alrededor de esto. Pero depende bastante de la capacidad que tenga la industria de manejar este material”.

“Esto va a seguir pasando y son millones y millones de toneladas que hay flotando en el océano. A nosotros lo que nos llegan son unos parchitos que se rompen y causan todos estos problemas, pero hay muchísimo. La realidad es que esto es un ˈcase by caseˈ, cada lugar tiene su peculiaridad y cada lugar tiene su manera de atender esto.

En el caso de Las Croabas, definitivamente yo apoyo la alternativa de la barrera flotante y la barcaza porque es un lugar que tiene poco oleaje, es tranquilo, tiene un solo punto de entrada y de salida, una bahía. Una de las cosas que estamos coordinando en Recursos Naturales, es la manera de crear como un grupo multisectorial porque se necesita el sector civil, la academia, el sector municipal y el gobierno estatal, todos de la mano para tratar cada situación según se vaya presentando y establecer un precedente porque esto va a seguir pasando”, concluyó el experto ambientalista.