Anoche se escribió un nuevo capítulo en la historia del país y los sureños salieron a las calles tan pronto escucharon la palabra más esperada.

A solo minutos de que el gobernador Ricardo Roselló anunciara su dimisión, el ambiente tenso que se vivió durante 12 intensos días acabó con una fiesta de pueblo.

Así se expresaron decenas de personas que se autoconvocaron al casco urbano de Ponce en una interminable caravana con gente de todas las edades, a donde cada cual sonó su bocina en señal de victoria.

Banderas en alto, cacerolazos, música y abrazos, fue lo que predominó en la Ciudad Señorial después de la medianoche, sobre todo, mucha juventud expresando su sentir.

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Hasta allí llegó un joven boricua parisino quien fue uno de los primeros en comenzar la celebración junto a familiares de Francia y San Juan.

“Mi familia boricua está aquí y toda mi familia francesa también, estamos aquí desde hace dos semanas viviendo la cosa, estamos celebrando nosotros. Estamos contentos porque por primera vez esto pasa, ahora viene para Puerto Rico lo mejor”, exclamó Tibo desde una la esquina casi frente al Museo Parque de Bombas mostrando la monoestrellada con orgullo.

Mientras el escritor, compositor y maestro de historia Juan Riestra saludaba a los sureños con una enorme bandera en la Plaza Las Delicias.

“Esto es historia, nunca se ha hecho esto en Puerto Rico que renuncie un gobernador por mandato del pueblo, estoy super orgulloso de mi patria. Fui de los primeros en llegar al Parque de Bombas, Ponce tiene que estar muy orgulloso también porque Ponce protestó mucho durante mucho tiempo”, confesó Riestra con emoción.

También llegó el ponceño Javier Costas con su familia, “bien contentos, estamos celebrando por la renuncia de Ricky Roselló, estamos cansados de tanto atropello, de tanta injusticia, de tanto maltrato hacia el pueblo de Puerto Rico, de verdad que esto es una bendición”.

Otro de los que dijo presente fue el juanadino Alexander Santiago y aseguró estar “contento porque el pueblo se unió y ahí el gobierno vio que cuando el pueblo se une hay que respetarlo. Estamos en una democracia y la democracia no es de cuatro años solamente, sino que el pueblo habla y hay que obedecer”.

Así seguían sumándose ciudadanos de pueblos cercanos, igual que Juandiego Martínez Rodríguez quien vino desde Peñuelas.

“Sentí mucha alegría ya que nosotros estamos ya en una situación que nos humillaban, la corrupción, humillación a las mujeres, también a nosotros, a los varones, pero ya estamos libres”, dijo Martínez Rodríguez, un maestro de Head Start de 30 años.

De forma similar se expresó el profesor ponceño Edwin Gabriel Núñez Laó.

“Al fin llegó el esperado mensaje del gobernador, quizás un poco tardío luego de 12 días de tanta intensidad, pero se logró la finalidad, el pueblo habló y el gobernador al fin pudo escuchar el reclamo del pueblo y accedió a renunciar a la gobernación”, sostuvo Núñez.

Cabe destacar que la Policía Municipal de Ponce cerró el acceso vehicular frente a la Casa Alcaldía por lo que los vehículos tuvieron que moverse por las calles laterales.

Pero eso no desanimó a la ciudadanía que mientras más pasaban los minutos, mayor fue su expresión.