Hormigueros.- Eso es lo que representa para las personas de más de 62 años que recién se  mudaron al nuevo complejo de viviendas Estancias Presbiterianas del Ángel en el barrio El Guayo, sector los Quiles, colindante con Hormigueros y Mayagüez.

Cuando llegamos al apartamento de María Pastor Montanez, de 65 años, se encontraba cocinando un arroz con garbanzos y una carne guisada cuyos olores llenaban  todo el piso tres del edificio de 4 pisos, con facilidad de ascensores.

“Me encanta, porque me dieron estufa, nevera, calentador, gabinetes y no pagamos agua e incluso yo camino a pie hasta el Mayagüez Mall, porque me quiero mantener en forma”, dijo llena de entusiasmo Pastor Montañez, quien se pensionó luego de muchas décadas como florista.

Para Elizabeth Torres Menéndez, de 78 años, pensionada como oficinista de la empresa privada, “esto es una maravilla, como entrar al lobby y las habitaciones de un hotel”.

“La administración es encantadora y los muchachos de mantenimiento, también”,  expreso la anciana sobre el edificio de 108 apartamentos de una habitación cada uno.

Gilberto Molina Olivares, de 66 años, es otro de los residentes que dijeron que el  lugar es acogedor y seguro.
En el caso de Moisés Ramírez Matos, pensionado de guardia de seguridad, “no hay nada mejor que vivir aquí”.

Por su parte, Bresselyn Rodríguez Cancel, administradora del complejo, dijo que hay ocupados 31 apartamentos –desde el 13 de julio–, pero confía en que antes de las Navidades estén todos  ocupados por personas que puedan  valerse por sí mismas.

Explicó que personas de cualquier pueblo cualifican  y el top e de  los ingresos por persona no de exceder de los $9,400 anuales para una persona y $10,700 por  pareja. No  es requisito que el solicitante tengan ingresos.

El reverendo Eduardo Miranda, portavoz de la Iglesia Presbiteriana bajo cuya iniciativa se construyó el proyecto  a un costo cercano a los $11 millones, se mostró complacido con el apoyo que recibió del alcalde de Hormigueros,  Pedro García,  quien  le otorgó al proyecto una exención de un 50% en el pago de arbitrios de construcción municipales.