Estudiantes de los diferentes recintos junto a miembros de organizaciones pertenecientes a la Universidad de Puerto Rico (UPR) llegaron hasta la calle Fortaleza en el Viejo San Juan para exigirle a la gobernadora Wanda Vázquez que asuma una postura ante la Junta de Supervisión Fiscal, defienda el presupuesto de la institución y la declare un servicio esencial.

Según Ángel Rodríguez, presidente de la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios, el nuevo recorte que se avecina para el nuevo año fiscal en la UPR llevará a la institución al cierre de recintos.

Y es que, para el próximo año fiscal, la UPR podría enfrentar un nuevo recorte de $71 millones estipulados en el plan fiscal, lo que se sumaría a los recortes de unos $300 millones que ha asumido la institución en los pasado años.

Con el recorte programado para el próximo presupuesto, que entraría en vigor el 1 de julio de 2020, la cifra de recortes aumentaría a $400 millones.

“Con este nuevo recorte que quieren imponer a la Universidad, llegamos cerca del 55% de pérdida del presupuesto de la Universidad y eso puede implicar el cierre de recintos, mayores aumentos en los costos de estudio, mayores plazas docentes que se pierden, mayores plazas no docentes y dañar nuestro plan de retiro”, señaló.

Rodríguez emplazó a la gobernadora a utilizar las mismas medidas que usó para lograr que la Junta aprobara el pago de bono de Navidad a los empleados públicos.

“El gobierno central tiene que sentarse a negociar con la Junta de Control Fiscal y defender la Universidad de la misma manera que hizo, y la felicitamos, que se pudo sentar con la Junta para poder conceder el bono. La Universidad también necesita ese trabajo porque en este momento la Universidad deja de existir como es. No es que deje de existir una Universidad de Puerto Rico, es que esa Universidad que exista es otra, completamente distinta a la que está ahora”, dijo.

El líder de la APPU aseguró que el problema es que la gobernadora ha mantenido diferentes reuniones, incluso con la Asociación, pero no ha hecho ningún compromiso. “El problema es que de reunión en reunión no hemos tenido ningún tipo de compromiso con respecto  a qué hacer. A mí me gustaría que me dijera algún tipo de compromiso y nosotros nos podemos sentar a discutir ese compromiso, nosotros estamos en la disposición de trabajar con cualquiera que quiera defender la Universidad”, indicó.

Marina Rodríguez Seguí, del Consejo General de Estudiantes de la Universidad de Puerto Rico, recinto de Río Piedras, por su parte, le pide a la gobernadora que se reúna con el sector estudiantil como lo ha hecho con los demás sectores y que detenga el recorte del presupuesto a la Universidad.

“Queremos que se posicione en defensa de la Universidad, que abogue porque la Universidad se declare como un servicio esencial para que estos recortes no le afecten y que, aunque la Junta de Control Fiscal es la que está implementando lo que es el plan fiscal, en la mano de ella está la distribución de cómo va a recortar el presupuesto”, apuntó.3

De igual manera, Rodríguez mostró preocupación ante ambigüedad del presidente de la Universidad, Jorge Haddock Acevedo, ante el asunto de un posible cierre de recintos. Fue precisamente el presidente el que denunció que la UPR podría enfrentar un cierre de recintos si se dada el recorte presupuestario y luego se retractó.

“Es bien preocupante porque no vemos un plan sobre cómo vamos a atender los recortes, cómo vamos a defender la Universidad que tanto él dice. Me preocupa mucho porque entendemos que se puede estar enfrentando a un recorte de $71 millones más se tiene que aportar $81 millones al plan de retiro y esto va a afectar la estabilidad de ocho recintos y tampoco hay un plan de cómo atender el cierre”.