“Que sea lo que Dios quiera” y “Dios nos cuida y nos protege” fueron frases que varios boricuas acuñaron este jueves mientras se encontraban en el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín, en Isla Verde, preparándose para emprender viajes a los Estados Unidos.

Es que aceptaron que, aunque tomen medidas preventivas para evitar contagiarse con el coronavirus COVID-19, recae en lo divino, en el destino o la suerte terminar o no enfermos.

Los que sí dijeron estar preocupados con la amenaza que provoca esta pandemia son los empleados del aeropuerto. Criticaron la falta de orientación en el mayor centro de turistas de la Isla y la posibilidad de tenerse que acoger a una cuarentena sin generar ingresos para sustentar a su familia.

En general, el ambiente en el aeropuerto era tranquilo. Los turistas caminaban tranquilamente, hacían sus filas para revisar sus maletas sin guardar una distancia exagerada y no había filas en los baños.

Para la cantidad de público que transitaba en la entrada principal de Aduanas, eran pocos los que se vieron con mascarillas, guantes o cualquier otro artículo recomendado para prevenir el coronavirus.

Bernice Santos, una residente de Aguadilla que viajaba a Filadelfia junto a su familia para visitar a una nieta, era una de las pocas que andaba con guantes puestos. También dijo que “tengo los ‘chubs’ de Lysol para pasarle a los asientos, tengo hand sanitizer, tenemos las mascarillas, pero no le vemos necesidad de ponérnosla”.

“Nos sentimos bien, porque Dios nos cuida y nos protege. El día que uno se vaya a morir, eso ya está destinado. Pero, nos sentimos seguros… Cuando vienen distintos virus que han venido, siempre pasa lo mismo, uno se trata de cuidar y todos los hemos sobrevivido. Estamos bien”, afirmó la mujer.

Entretanto, Emmanuel Matos, quien se muda desde Corozal hacia Pensilvania, caminaba tranquilamente y hablando por su celular en el aeropuerto. No cargaba en las manos con ningún producto. Dijo que los tenía guardado en su bulto.

“Tengo los guantes que me los voy a poner ahora para protegerme, (porque) los cinturones es lo que más bacteria tiene. Me lo dijeron… Y me pongo una mascarilla que también tengo. Que sea lo que Dios quiera. Vite, positivo”, soltó el joven.

Matos, sin embargo, se río cuando se le preguntó qué haría si contrae el coronavirus. Lo que indicó fue que ingiere unos productos para fortalecer el sistema inmunológico.

“Estoy positivo y eso no me va a afectar a mí, porque estoy positivo”, acotó.

La cagüeña Piscilla Ortiz Rivera, quien viajaba a Florida a culminar su mudanza hacia la Isla, sí dijo estar preocupada ante la posibilidad de contagiarse. Es que cuida a sus padres de 86 y 83 años.

“Tengo que prepararme, porque cuando regrese vengo a casa de mis papás y mi mamá está delicada de salud y no quiero contagiarla”, afirmó la mujer, quien fue captada mientras se bajaba del auto con una mascarilla en las manos.

Ortiz Rivera, de paso, criticó las medidas tomadas por el gobierno para lidiar con esta crisis.

“No estamos en transparencia. Yo sé que lo hay y se está diciendo que en Centro Médico hay. Si no hay transparencia desde el gobierno hacia arriba y hacen estas cosas, como lo que hizo esta muchacha de Turismo, (Carla Campos), que tan siquiera se protegió, o sea no tomó medidas. Ella debió haber sido un poquito más responsable, por lo menos usar guante, usar su mascarilla. Esto es inevitable”, expresó, al hacer referencia a que la funcionaria estuvo en el crucero de donde se identificaron los primeros dos casos sospechosos de la enfermedad.

Por su parte, Karla Cañuelas, de Barranquitas, acudió al aeropuerto junto a su hija, Katieane de Jesús, a llevar a una amiga que se iba de viaje.

La madre sí mostró preocupación con la posibilidad de que sus niñas se contagien. Sin embargo, expuso que puede ser tanto en el aeropuerto como en cualquier actividad.

“Hay que coger las cosas con calma y mantener sus manos limpias, sanitizer, cuidarse, no pegarse a personas que estén enfermas”, expresó.

Por otro lado, varios empleados del aeropuerto denunciaron que no se han colocado letreros que alerten a la población de la enfermedad y han tenido que traer su propio equipo de protección.

Josean Pérez, empleado de Travel Destination Puerto Rico, declaró que “he visto mucho que los empleados están usando guantes. Por lo menos hay algo. Fuera de eso, no he visto ‘sign’ ni nada, como un ‘awareness’ bastante grande, o sea, cosas que digan que tengan cuidado o prevención. No he visto sign. Así que es un poco preocupante eso. Fuera de eso, pues entiendo que debe haber una mejor manera de llevarle la información a la gente que esté trabajando aquí y eso para que la gente esté más pendiente”.

Indicó que le preocupa contagiarse ante el alto tránsito de turistas que hay en el aeropuerto, porque afectaría a su familia.

“Es una preocupación grande, pero hay que llevar de comer a la casa. Uno tomar medidas de precaución, aunque te tengas que exponer a estas cosas”, puntualizó.

El maletero José Luis Figueroa, de la Cooperativa de Servicio y Equipaje, detalló que fueron los propios maleteros quienes llevaron ‘hand sanitizer’ para protegerse. Dijo que luego de tomar esta medida, fue que les proveyeron reemplazos en el aeropuerto.

Admitió estar muy preocupado, pues “yo soy el sustento de mi casa. Si me enfermo, no puedo venir a trabajar. Hay más compañeros que se pueden contagiar”.

Como medida de precaución, el hombre dijo que antes del salir del aeropuerto se lava las manos en el baño. Luego, cuando llega a su casa, “rápido a bañarse uno, a sacarse las impurezas”.